VOLGOGRADO, Rusia (AFP). Akira Nishino podría ser perdonado si Japón consigue el empate que necesita contra la eliminada Polonia hoy para alcanzar los octavos de final del Mundial-2018.
Hace poco más de dos meses ni siquiera estaba a cargo del combinado nacional y su jugador más conocido, Keisuke Honda, estaba lejos de subirse al avión camino a Rusia.
Ahora Japón solo necesita un empate contra la eliminada Polonia en Volgogrado para llegar a los últimos 16, gracias a un empate tardío de Honda contra Senegal.
En su debut, los nipones consiguieron el primer triunfo de la historia de una selección asiática frente a un sudamericano en la Copa Mundial, cuando derrotaron 2-1 a Colombia, que jugó prácticamente todo el partido con 10 hombres.
Incluso una derrota puede ser suficiente si Senegal derrota a Colombia, aunque Japón depende de sí mismo solo meses después de que sus esperanzas en el mundial parecieran remotas.