Rosaura García

Madre de la Mesa Redonda Panamericana de Tegucigalpa

Adylia Zavala

Rosaura, es originaria de Tegucigalpa, nace el 21 de abril de 1953, es la hija mayor del hogar formado por Vicente García y María del Carmen  Izaguirre de García. Es una mujer muy inteligente, dinámica profesional de la psicología con especialidad en género y actividades agropecuarias, ha viajado para acrecentar su acervo cultural  a diferentes países entre ellos: Israel, Egipto, España, centroamericana y más… Se caracteriza por su cautivadora firmeza de propósitos, sinceridad en sus ideas, amor y comprensión  de las debilidades humanas; también, por su solidaridad con sus amigas y compañeras panamericanas. Como mujer es una extraordinaria defensora de las mujeres y sobre todo de las mujeres marginadas, dado que es defensora de la no discriminación y proclama la declaración Universal de los Derechos Humanos, que “todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos, y los proclama con los grupos de mujeres campesinas con que trabaja en el Instituto Nacional Agrario; porque ella, está convencida que la mujer, dándole educación es indispensable para el desarrollo pleno y sostenible de nuestra Honduras . Mismo que es clave para propiciar la paz del país y del mundo entero.

Rosaura considera que así como afirmaba el sabio Valle: que “darle educación a un hombre es educar a una persona, pero educar una mujer es educar a una familia”, el gran aporte de la mujer  madre, campesina, obrera y profesional, al bienestar de la familia y al desarrollo de la sociedad es  hasta ahora en un gran porcentaje invisible… porque el  papel que juega la mujer, no está plenamente reconocido por la sociedad y el Estado; y tampoco,  la importancia social de la maternidad en la educación espiritual, moral y sistemática de los hijos. Rosaura con su grupo de mujeres campesinas, se honra en prepararlas a través de la capacitación para que sean productoras, estableciendo microempresas, y elevándoles la autoestima para garantizarles el ejercicio y goce de los derechos humanos y libertades fundamentales en igualdad de condiciones con el hombre.

En el ámbito personal cabe destacar que  está casada con Pedro Armando Santos, con quien formó un hogar guiado por los principios  familiares y cristianos, donde crecieron y se desarrollaron sus hijas Viena y Djanira a quienes les trasmitió valores de amor, hermandad y solidaridad y lo más importante la fe en Dios y en ellas mismas. Como abuela es cariñosa, abnegada y amiga de sus tres nietos. Romel Alejandro, Javier Armando y Devin. Como panamericana, está dotada de una inteligencia y un pensamiento organizado;  tiene un gran poder de gestión;  hace gala de la amistad y de la solidaridad, es amante de dar a conocer los valores cívicos históricos y culturales de nuestra Honduras y sobre todo en la materia de género. En el 75 aniversario de fundación de la Mesa Redonda Panamericana, rendimos honor como madre a esta gran mujer, imbuida de deseos de practicar el bien común.

“Felicidades Rosaura García Madre Panamericana”.