Niñeras y familias protestan contra políticas de detención familiar de Trump

Niñeras, proveedores de cuidado infantil y familias protestaron hoy frente a una oficina del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) del sur de Florida contra la política de detención de niños y familias de la Administración Trump, como inicio de una serie de actos que realizarán en Estados Unidos.

Hasta el próximo miércoles 25 de julio cuidadoras infantiles liderarán diversos actos de protesta en ciudades como Nueva York, Boston o Seattle, aunque se prevén más protestas a partir de esa fecha.

La primera movilización tuvo lugar hoy en localidad floridana de Miramar (al norte de Miami), donde organizaciones como la Alianza Nacional de Trabajadoras del Hogar o la organización proinmigrantes United We Dream protestaron por el trato «inhumano» a las familias indocumentadas detenidas en la frontera sur.

Lo hicieron ante una oficina de ICE y aprovecharon la ocasión para pedir el cierre permanentemente de esta agencia federal de control migratorio.

Alrededor de un centenar de manifestantes, según datos de los organizadores, cortaron la calle donde se encuentra este centro al grito de «Abolid ICE» y con camisetas que rezaban la misma consigna.

«Que no construyan más campos de detención. Nuestros niños están siendo torturados física y psicológicamente», dijo Yaquelin López, de Women Working Together.

López, madre indocumentada del sur de Florida y quien fue niñera durante seis años, aseveró que los niños «necesitan sol y juegos, no rejas», y denunció las condiciones «lamentables» en las se encuentran las familias que son citadas a este centro de Miramar.

«Están sometidos a un maltrato constante. Tienen que esperar horas al sol. Es un edificio público y están violando las leyes. ¿Tiene que morir alguien para que hagan algo?», aseveró López.

Niñeras como López, junto a padres y maestros, exigieron el fin de la política de «tolerancia cero» impulsada por el presidente Donald Trump y su medida, ya cancelada por las enormes críticas recibidas, de separar de sus padres a unos 3.000 hijos que cruzaron la frontera con México.

Por orden judicial, el Gobierno deberá haber entregado el próximo día 26 a más de 2.500 menores de entre 5 y 18 años que todavía siguen lejos de sus padres.

Más allá de pedir la celeridad de este proceso, las protestas exigen el fin de la detención «conjunta e indefinida» de las familias en centros de detención o bases militares.

La segunda movilización del país tendrá lugar esta tarde en Nueva York, donde cuidadoras y padres celebrarán un juicio simulado contra ICE por «maltratar niños», cuya sentencia será anunciada por los mismos niños.

«Ningún niño debería tener que experimentar este tipo de trauma, daño o miedo. No dejaremos que esta administración hiera a más niños, no bajo nuestro cuidado», aseguró en un comunicado Allison Julien, organizadora de la organización de trabajadoras del hogar We Dream in Black en Nueva York.

Las próximas movilizaciones tendrán lugar en Boston el 19 de julio, en Burlington y en Greenfield (Massachusetts) el 20 de julio, en Seattle (Washington) el 24 y en Baltimore (Maryland) el 25 de julio. (EFE)