“Esperamos que en las próximas horas se materialicen las pláticas con los transportistas” y se logren los acuerdos proyectados, dijo el ministro de la Presidencia, Ebal Díaz.
Los transportistas acordaron no ejecutar paros en 48 horas, para elaborar un documento que será entregado a las autoridades.
En ese estudio, la dirigencia propondrá en qué partidas presupuestarias se pueden hacer recortes, sin que eso implique un sacrificio fiscal.
Al respecto, Díaz sostuvo que los transportistas quieren que el gobierno baje el impuesto a los combustibles, pero hay que recordar que ese tributo lo aprueba el Congreso Nacional, no el Ejecutivo.
Ese impuesto nutre las arcas del Estado y su totalidad representa un 8% del presupuesto nacional, estamos hablando de 13,800 millones de lempiras, precisó.
Eso significa que no le transferiríamos fondos por tres años a los 298 municipios del país, detalló.
Eso significa dos veces el presupuesto de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y el presupuesto de las secretarías de Defensa y Seguridad, según el funcionario.
Si solo son 20 lempiras menos a los carburantes entonces estamos hablando de 7 mil millones de lempiras, pero igual, esa es una cantidad enorme de recursos que en estos momentos están presupuestados, indicó.
Ese presupuesto ya está diseñado para atender diferentes necesidades para el funcionamiento del país, dijo.
“Si decidimos bajarle los 20 lempiras, eso solo se distribuirá en menos de un millón de personas que tienen carro, entonces a los transportistas les tocará un poquito de esa gran masa”.
Además que eso no les resolverá el problema, aunque sí, es un alivio, pero más allá de eso hay que analizar el sacrificio fiscal de una magnitud de 7 mil millones de lempiras.
“Por eso hemos planteado que esa propuesta se debata en una mesa amplia en el que participen otros sectores, pues ni siquiera estamos diciendo que renuncien a esa posición de rebajar 20 lempiras a los carburantes”.