Por: Ing. Francisco Morales h.
Las finanzas personales son parte de nuestra vida, lo queramos o no, las manejemos conscientemente o inconscientemente, igual están y estarán siempre presentes.
Las finanzas personales erróneamente se conceptualizan como aquellas prácticas que nos limitan de comprar o consumir lo que nos gusta, de forzarnos a ahorrar todo lo que uno pueda sin disfrutar plenamente el día de hoy, se trata de vivir nuestra vida bajo un estricto control presupuestario pensando en un mañana que quizás nunca llegue, evitando gastar en aquellos productos o experiencias que realmente nos gustan, atraen y divierten.
Quienes así piensan, están totalmente equivocados. El correcto manejo de las finanzas personales es la clave de la libertad financiera y para lograrla se necesita ordenarse y conocer a detalle sus prioridades financieras.
Se ha preguntado el amable lector: ¿Cuáles son sus prioridades financieras?, si ya las tiene identificadas, es un gran paso hacia lograr obtenerlas; sin embargo al igual que sucede en otras áreas de la vida: entre lo dicho y lo hecho, generalmente hay mucho trecho.
Usted puede correctamente pensar que dentro de sus prioridades financieras están: lograr un retiro digno para usted y su pareja, tener la casa propia de sus sueños, pagar las mejores escuelas, colegios y universidades para sus hijos, tener ahorros suficientes para no preocuparse, disponer de fondos para viajar junto con su familia y amigos, tener su propio negocio en un futuro cercano, continuar estudiando, aprender otro idioma, ir al gimnasio, hacer inversiones en bienes raíces, cambiar de vehículo cada cierto tiempo, reducir el nivel de sus deudas y estar preparado para una eventualidad que no necesariamente tiene que ser un evento negativo, sino uno que nada más demande de dinero, por ejemplo: la fiesta de graduación de sus hijos o la boda de sus hijas.
A nadie le gusta pensar que se puede enfermar y que se va a morir, aunque esto último, morirse, es lo único seguro que se tiene por sentado en esta vida, pues todos nacimos y algún día moriremos, todos sin excepción, no lo menciono para desanimarle sino para cuestionarse lo que pasaría a sus seres amados cuando usted ya no sea parte de este mundo terrenal y aclaro que es mi mejor deseo que el amable lector tenga una vida larga y próspera.
Si de verdad quiere saber cuáles son sus prioridades financieras, las reales no las que quisiera tener o con las que sueña; la mejor o inclusive, me atrevería a decir, la única manera de hacerlo consiste en analizar a conciencia sus gastos. Sus verdaderas prioridades financieras le serán reveladas de esta manera, y los resultados quizás le sorprendan.
Claro, y por suerte también sus prioridades financieras reales o actuales si no le agradan, son sujetas a ser modificadas o cambiadas por completo una vez identificadas y analizadas y así enfocarse en lo que realmente desea obtener en esta vida.
¿En qué gasta usted su dinero?, ¿lleva un presupuesto mensual?, ¿cuenta con un seguro de vida?, ¿un seguro de gastos médicos?, ¿cuánto ahorra al mes?, ¿cuántas y cuáles son sus deudas de corto y largo plazo?, ¿a qué tasas de interés?, ¿gasta usted más de lo que gana?, ¿de qué va a vivir cuando se retire?, ¿piensa trabajar en su retiro?
Idealmente se debería de comenzar a ahorrar para el retiro desde que se tiene el primer trabajo, de igual manera debería de contraer matrimonio con su pareja ideal y estar económicamente estable a la hora de comprometerse y planificar el nacimiento de los hijos para estar preparados y poder proveerles lo mejor, pero, la vida pasa y los acontecimientos llegan, estemos preparados o no.
El problema no es gastar, sino la forma en que gastamos; el utilizar nuestro dinero para adquirir lo que deseamos y no lo que necesitamos nos aleja de aquellas cosas que en verdad queremos lograr.
Una vez que identifique cuáles son sus prioridades financieras, las que de verdad desea obtener, será hora de hacer ajustes y dejar de gastar su dinero en lo que quiere y comenzar a utilizarlo en lo que necesita. Hay una diferencia tangible entre deseo y necesidad.
Utilice su dinero sabiamente. Es de sabios pensar antes de actuar, así como también pensar antes de gastar.
Siempre recuerde: el manejo correcto de las finanzas personales es la clave para alcanzar el éxito económico.