Los restos del inmigrante hondureño Melvin Josué Gómez, quien murió el lunes en México, cuando iba en la caravana que salió de su país el pasado 13 de octubre hacia Estados Unidos, fueron sepultados hoy en el norte de Honduras.
Gómez fue enterrado por sus familiares y amigos en un cementerio de San Pedro Sula, la segunda ciudad más importante de Honduras, de donde el 13 de octubre miles de inmigrantes hondureños salieron en ruta, de manera ilegal, hacia Estados Unidos, aduciendo la falta de trabajo e inseguridad.
El inmigrante murió al caerse del tráiler en el que iba montado en el trayecto entre Tapachula y Huixtla, en el estado de Chiapas (sureste de México), lo que constató Efe.
Según relatos de sus familiares, luego de que llegó a la frontera entre Guatemala y México, le indicaron que presentían que algo malo le podría ocurrir, por lo que le pidieron que mejor se regresara, pero él decidió seguir en la caravana.
Gómez es el segundo hondureño de los que salieron en la caravana el día 13 que han muerto en el camino.
El primero fue Germán Ramírez, quien falleció en Guatemala el día 20 después de ser atropellado sobre el kilómetro 30 de la Ruta al Pacífico, cuando sufrió una caída accidental del vehículo en el que había pedido ser transportado junto a otro grupo de inmigrantes hondureños que entonces cruzaban Guatemala.
El cadáver de Ramírez fue sepultado el martes, en la aldea El Ermitaño, departamento de Copán, en el occidente de Honduras, limítrofe con Guatemala, de donde era originario. (EFE)