En el 2018 trascendió un fuerte impulso en la producción y comercialización de productos agropecuarios a mercados exigentes como Estados Unidos y Europa, a través del fortalecimiento de las capacidades sanitarias, fitosanitarias y de inocuidad agroalimentaria, y en avances en la simplificación administrativa.
Lo anterior es parte de un informe emitido por autoridades del Servicio Nacional de Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria (Senasa), adscrita a la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG).
Las autoridades sanitarias destacaron la ampliación de los programas de vigilancia de enfermedades en un 20 por ciento con 5,810 hatos ganaderos bajo control sanitario, logrando a su vez un récord sin precedente de declaración de 217 fincas libres de enfermedades zoosanitarias como la brucelosis y tuberculosis bovina.
Como parte de este proceso también se fortaleció la alianza público-privada a través de un convenio de cooperación técnico financiero con el sector productivo y la industria lechera, que tiene como objetivo lograr 2,100 hatos ganaderos adicionales bajo control sanitario al 2020.
Adicionalmente, el Senasa, con el apoyo y colaboración del sector pecuario logró la identificación de 74,895 bovinos, el registro de 2,127 productores y de 1,990 establecimientos.
Incluye la habilitación de 74 operadores privados de trazabilidad para ejercer actividades sanitarias en campo complementarias a la labor que realiza, permitiendo ampliar las capacidades de respuesta a los ganaderos nacionales y optimizando los recursos de la institución.
También, sobresale un aumento en las capacidades de los puestos de control cuarentenario en el aeropuerto Toncontín con la incorporación de los primeros 3 binomios caninos para inspección de equipaje de pasajeros, que contribuye a la labor en la protección del patrimonio agropecuario nacional.