EEUU acusa a abogada rusa que tuvo contactos con el equipo de campaña de Trump

New York, Estados Unidos | AFP).- Una abogada rusa que se reunió en 2016 con varios miembros del equipo de campaña del presidente estadounidense, Donald Trump, fue acusada por obstaculizar el ejercicio de la justicia en un caso diferente, pero que pone en evidencia sus vínculos con el Kremlin.

Natalia Veselnitskaya se hizo conocida tras la revelación de su encuentro, en junio de 2016, con varios miembros del equipo de campaña de Trump, especialmente con su hijo, Donald Trump Junior, y su yerno, Jared Kushner, en la Torre Trump de Nueva York.

Trump Jr se entrevistó con Veselnitskaya pensando que, debido a sus vínculos con el gobierno ruso, podría proporcionarle informaciones comprometedoras sobre la candidata demócrata Hillary Clinton.

Los Trump afirman que este encuentro no significó nada y que, de hecho, la abogada fue para hablar del espinoso asunto de las adopciones entre Rusia y Estados Unidos.

Este encuentro interesa sin embargo al fiscal especial Robert Mueller, que investiga los vínculos entre la campaña de Trump y el ejecutivo ruso.

Según el acta de acusación desvelada este martes, Veselnitskaya está acusada de haber fabricado, con la colaboración de un responsable de la fiscalía rusa, documentos que exculpan a algunos de sus clientes que son cuestionados por la justicia estadounidense.

Estos clientes están acusados de haber blanqueado más de 200 millones de dólares procedentes de un mecanismo de desvío de fondos de la administración fiscal rusa a través de inversiones en el mercado inmobiliario de Estados Unidos.

Interrogado por la AFP, un portavoz del fiscal general de Manhattan Geoffrey Berman indicó que Veselnitskaya no estaba «detenida y que probablemente no estaba en territorio estadounidense».

Preguntada por la cadena rusa Rossiya 24, la inculpada dijo que se había enterado de su acusación por la prensa. «Desconocía la esencia del asunto y los detalles», afirmó.

«Imagino que todo esto está destinado a impedir que ejerza mis actividades profesionales relacionadas con asuntos muy sensibles para Estados Unidos», comentó la abogada, aludiendo a la «ley Magnitski», que lleva el nombre del abogado que reveló el escándalo del blanqueo en Rusia.

Veselnitskaya explicó también que sus actividades estaban vinculadas con «la corrupción de la justicia y del Congreso» estadounidenses. «No puedo sino considerarlo un intento de impedir que se hagan públicos esos hechos», agregó.

– Mecanismo de presión –

Veselnitskaya, de 43 años, está acusada de obstaculizar el ejercicio de la justicia, una acusación sancionable con diez años de prisión.

Aunque ese asunto no tiene relación directa con los contactos que tuvo con el equipo de Trump, podría ser un mecanismo de presión de la justicia estadounidense de cara a obtener su colaboración en la investigación del fiscal especial Mueller.

Inicialmente cuestionado por un asunto de fraude que no tenía nada que ver con Donald Trump, el exabogado del mandatario, Michael Cohen, por ejemplo, colaboró finalmente con la justicia estadounidense acusando directamente al presidente por otro asunto.

Por su parte, el Kremlin aseguró en 2017 que «nunca había estado en contacto» con Veselnitskaya, y ella misma negó cualquier vínculo eventual con el Kremlin.

La abogada respondió a finales de 2017 a las preguntas de la comisión judicial del Senado sobre su reunión en la Torre Trump, negando haber mencionado informaciones sobre Hillary Clinton.

El mecanismo de desvío de fondos de la administración fiscal rusa fue revelado por el abogado ruso Serguéi Magnitski en 2008, acusado algunos meses más tarde en Rusia y que falleció mientras estaba detenido en 2009 en extrañas circunstancias.

Actualmente una ley estadounidense, votada por el Congreso en 2012, prevé sanciones financieras contra funcionarios rusos sospechosos de estar implicados en la muerte de Magnitski. En contrapartida, Moscú adoptó una ley que prohíbe la adopción de niños rusos por parte de ciudadanos estadounidenses.