SIGUATEPEQUE, Comayagua. La ubicación estratégica de «La Ciudad de Los Pinares» permite el crecimiento del turismo de convenciones, eventos y reuniones como oportunidad de desarrollo, porque a diario por la carretera internacional CA-5 son miles de personas que transitan pensando que el imponente lugar donde se elabora el delicioso dulce «alcitrón» es un lugar solo de paso sin saber que ofrece múltiples opciones.
El auge que tiene dicho turismo permite que empresarios dedicados a este rubro continúen invirtiendo para ofrecer comodidad, seguridad, disfrutar de lugares mágicos que están en contacto con la naturaleza, la gastronomía local cuya característica es ser buen anfitrión porque son múltiples empresas, iglesias, delegaciones e instituciones que aquí realizan diferentes celebraciones.
En Siguatepeque tienen lugar convenciones, reuniones, presentaciones, lanzamientos de productos, bodas, cumpleaños, ferias, 15 años, conciertos, y otros eventos sociales en que las personas tienen la facilidad de ejercer su trabajo y de manera simultánea poder disfrutar de recreación en un mismo lugar.
En Siguatepeque este potencial lo tiene el centro de convenciones y complejo turístico Granja D´Elia, referente en la temática que se convirtió en el más importante de la zona central de Honduras, con capacidad para atender a 5,000 personas en seis salones y se suma la atención en el restaurante, supermercado, café, hotel, área recreativa (piscina, centro de masajes, gimnasio, senderos), helipuerto (en construcción) y mucho más, muy cerca de las dos ciudades más primordiales del país: la capital y San Pedro Sula.
El empresario Amedeo D´Elia, con una experiencia muy amplia en la temática, vive hace 44 años en el altiplano, habiendo fundado en 1978, con su esposa Elena D´Elia, esta fuente de empleo.
“Estoy construyendo un helipuerto para cuando viene una personalidad poderla atender ella se baja en la misma instalación sin ningún atraso en ningún lado; continuamos mejorándolo y estamos pintando un mural que tendrá una niña con el violín, me encanta su inocencia y no quise poner alguna otra cosa porque tenemos que cuidar el respeto de los demás, es un orgullo, le pido a Dios que me de vida para seguir», puntualizó. (REMB)