Dos niños murieron calcinados en un voraz incendio que se registró en su casa cuando dormían, mientras su madre bailaba en una fiesta de Año Nuevo.
El trágico suceso se registró en la comunidad de Río Esteban, en el departamento de Colón, Honduras.
Según vecinos, la progenitora dejó solos a sus cuatro hijos, alumbrados con una candela, la cual podría haber provocado el incidente.
Los pobladores relataron que un fuerte olor a humo los alertó del hecho, pero que al intentar rescatar a los pequeños de 3 y 5 años las llamas los habían calcinado.
Dos de los menores fueron rescatados a tiempo y presentan quemaduras de segundo y tercer grado.
Los pequeños fueron trasladados a un centro asistencial de la zona, donde se dijo que su diagnóstico es reservado.
Las autoridades investigan cómo ocurrió el incendio para determinar la responsabilidad de la madre.
El 20 de diciembre se informó que un bebé fue devorado por ratas gigantes, cuando la madre también salió a bailar.