La meta de recaudación de impuestos propuesta para el presente año asciende a 90,000 millones de lempiras y para el 2018 está proyectada en 98,000 millones.
Los contribuyentes enfrentarán una mayor presión tributaria, puesto que las autoridades del Servicio de Administración de Renta (SAR) que redoblarán sus controles sobre los contribuyentes.
En las disposiciones del Presupuesto General de la República del 2017, se establece como una de sus metas principales elevar en alrededor de 9,000 millones de lempiras la recaudación tributaria.
Las proyecciones están dadas para que este año los ingresos por el pago de cargas tributarias lleguen a 90,000 millones de lempiras, una cantidad superior en 9,000 millones a los 81,000 millones de lempiras que se había previsto captar el año anterior.
Estos recursos estarían distribuidos entre los impuestos sobre la Propiedad, la Producción, Consumo y Ventas, Servicios y Entidades Específicas, Renta, Importaciones, Beneficios Eventuales e ingresos no tributarios.
De acuerdo con lo previsto por el Gabinete Económico, la Administración Central recibirá 26,100 millones de lempiras en concepto de Impuesto sobre la Renta y 43,200 millones por el pago de tributos sobre Producción, Consumo y Ventas.
Otros 16,600 millones de lempiras serían aportados a las finanzas públicas por Servicios y Actividades Específicas como es el caso de revaluación de activos, servicios de vías públicas, traspaso de vehículos, turismo y aporte de diversos sectores a la Tasa de Seguridad Poblacional.
Los cargos relacionados con la propiedad le dejarán al fisco cerca de 700 millones de lempiras en 2017, el Impuesto sobre las Importaciones contribuirá con 4,100 millones y los cargos a los beneficios eventuales y juegos de azar aportarán 10 millones.
La estructura tributaria de Honduras sigue descansando en los impuestos sobre la Renta y sobre la Venta.
El pago de tributos en el período de 2019 está calculado en 107,000 millones de lempiras, mientras que el objetivo de captación de impuestos para 2020 está cifrado en 117,000 millones.
Un informe del Consejo Monetario Centroamericano establece que Honduras tiene la presión tributaria más elevada de la región con un 17.4%, mientras que en Guatemala se paga el 10.2%.
Agrega el documento que en Nicaragua la presión tributaria es del 15.7%, en El Salvador asciende a 15.2% y en Costa Rica se cobra el 13.7%.