Un soldado de las Fuerzas Armadas de Honduras murió envenenado en el departamento de Ocotepeque.
La víctima respondía al nombre de Ángel Eduardo Carranza, quien era soldado del Séptimo Batallón de Infantería.
Se conoció que el joven viajó a Ocotepeque para visitar a su familia, debido a que gozaba de permiso por las fiestas de fin de año.
Según su madre, su hijo fue envenenado a través de los alimentos.
El joven fue ingresado al Hospital de Occidente con síntomas de intoxicación, donde falleció.
Las autoridades de la entidad castrense realizan investigaciones para determinar lo que le causó su muerte.