Las remesas tendrán tendencia alcista durante las primeras semanas de marzo, pero después estas caerán, según el coordinador del Foro Social de Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), Mauricio Díaz Burdeth.
“Una vez que las personas pierdan su trabajo o lo que tenga que ver con su hora de trabajo o las deportaciones, la caída de las remesas es inminente”, expuso el analista económico.
La expectativa es que sea menor al nivel de remesas registradas en año anterior, es decir el dos por ciento y la posibilidad que caiga es grave.
Señaló que el Banco Central de Honduras (BCH), calculó que si las remesas caen en un 20 por ciento lo que representa unos 800 millones de dólares, el tamaño de la economía disminuiría en más de un uno por ciento.
A su juicio la diplomacia hondureña deberá atenuar el problema, y pronunciarse ante la dificultad que es grande.
Otro aspecto que estima el Fosdeh es que existe la posibilidad de un aceleramiento a la devaluación de la moneda.
Cabe mencionar que el año anterior Honduras recibió unos tres mil 952 millones de dólares por concepto de remesas familiares.
