Una boa hambrienta eligió mal a su alimento: un puercoespín…
Estas serpientes atrapan a su presa y tratan de asfixiarlo a través de la constricción, pero cuando el cuerpo de su víctima está cubierto de púas, tal vez la cacería no será nada fácil… es más, puede ser mortal…
Estos roedores están cubiertos de púas, que les sirven como defensa, ya que al sentir un peligro, se enroscan sobre el vientre y dejar que el atacante se encuentre con sus púas, que son fáciles de desprenderse de su cuerpo e insertarse en el del cazador.
Existe la creencia de que estos roedores pueden lanzar a voluntad sus púas, pero esto no es cierto. Otra característica, es que esta defensa natural, una vez que entra en contacto con el atacante, es muy fácil que infecten la herida que producen.
Desafortunadamente a una boa se le antojó comerse un bocadillo de puercoespín, pero el resultado no fue el esperado… un hombre brasileño grabó los momentos posteriores al intento de alimentarse de esta serpiente…
Es evidente el dolor del reptil, pues incluso tiene la boca lena de estas púas, mismas que a la postre, le causaron la muerte. Bien dicen por ahí que elegir correctamente nuestros alimentos son la base de una vida más larga…
