Hasta 12 años de prisión por incendios forestales

Una pena de hasta 12 años de prisión solicitará el Ministerio Público (MP), contra los pirómanos del bosque y el Instituto de Conservación Forestal (ICF) y la Fuerza de Tarea Contra el Crimen Ambiental buscan a los responsables de los incendios en la foresta, informaron autoridades ambientales de Honduras.

A finales de la semana pasada se desató un gigantesco incendio que destruyó más de 400 hectáreas de bosque de coníferas (pinos) y hoja ancha (roble y otros árboles), en las zonas de El Hatillo y El Picacho y el primer parque nacional “La Tigra”, que abastece con más del 40 por ciento de agua a la capital hondureña.

Para aplacar las llamas que por poco arrasan viviendas, participaron centenares de “apagafuegos”, del Cuerpo de Bomberos, Fuerzas Armadas, voluntarios del Programa “Chamba Comunitaria” y pobladores con el apoyo de helicópteros de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) y la Fuerza de Tarea Conjunta Bravo del Ejército de Estados Unidos, acantonada en Palmerola, Comayagua.

“Ha sido el terrible principio de ecocidio si no se toman medidas drásticas al respecto”, alertaron sectores ambientalistas, como algunos miembros de la Fundación “Amigos de La Tigra” (Amitigra), que trabaja en ese ecosistema de bosque nublado productor de agua para la capital y comunidades adyacentes.

LEY FORESTAL

La capital de Honduras ha quedado cubierta por una densa capa de bruma y humo debido a los últimos incendios forestales en el Distrito Central y aún había remanentes (foto inserta), el sábado anterior.

Para sancionar a las personas inconsecuentes, enemigas de la naturaleza, los pirómanos que le prenden fuego al amigo bosque, refugio de una rica biodiversidad (fauna y flora), la Ley Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre de Honduras, establece penas que van desde los seis a 12 años de cárcel.

Personal del ICF y la Fiscalía Especial del Medio Ambiente del Ministerio Público (MP), les siguen la pista de cerca a los sospechosos del siniestro, mientras una versión indica que un leñador descuidado prendió una fogata para cocinar y los vientos esparcieron chispas que pudieron desatar la vorágine.

Con todo, autoridades del Ministerio Público hondureño pidieron a los vecinos de El Hatillo que colaboren facilitando fotos o vídeos de los responsables del incendio. “A nosotros como ICF nos corresponde la preparación de los informes técnicos y la evaluación de daños”, señaló el director del ICF, Misael León Carvajal.

“El tema del castigo a los provocadores de estos incendios que pueden ser de manera culposa y dolosa con la intención de provocar el incendio, ya corresponde a la Fiscalía Especial del Medio Ambiente hacer todas las investigaciones”, precisó el funcionario.

El ICF mide los impactos del siniestro en la flora, la fauna, el suelo y el agua para definir medidas precisas y una acción inmediata inicia en la temporada de lluvias con la reforestación y la meta es sembrar seis millones de plantas, principalmente en las áreas afectadas por el fuego y la plaga del gorgojo descortezador del pino.

El ICF, al frente de 18 instituciones más que conforman el Comité Nacional de Protección Forestal (Conaprofor), dirige los esfuerzos para intensificar la campaña de prevención de los incendios forestales y controlarlo cuando se desatan.

ALERTA TEMPRANA

Cuadrillas del ICF trabajan en labores de prevención y control en los bosques, sobre todo por el peligro que supone el verano en la incidencia de siniestros forestales.

El Conaprofor está integrado por la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Fuerzas Armadas, las Secretaría de Educación, la de Agricultura y Ganadería (SAG), de Recursos Naturales, Ambiente y Minas (MiAmbiente) y entes del sector privado y la sociedad civil.

“Estamos implementando el plan, contamos con 5,000 personas a nivel nacional, entre Fuerzas Armadas y el ICF, a través del Programa Chamba Comunitaria, y con fondos propios se rehabilitaron 32 torres de observación como sistemas de alerta temprana para incendios forestales”, detalló el director del ICF.

Misael León Carvajal: “Incendios pueden ser de manera culposa y dolosa con la intención de provocar el daño”.

Una prioridad en este país centroamericano es reforestar y conservar las cuencas hidrográficas, abastecedoras de agua, y áreas protegidas, así como la evaluación y protección de 100 mil hectáreas de zonas recuperadas mediante regeneración natural para sobreponerse a los efectos del cambio climático.

En regeneración de áreas, el ICF evalúa los resultados de sembrar hasta 4,000 plantas en todo el vasto departamento nororiental de Olancho, el norteño Yoro y el norte del central Francisco Morazán.

En cuanto a los pirómanos del bosque, la Fiscalía ha logrado una sentencia condenatoria por el delito de incendio forestal contra un hombre llamado Juan Santos Murillo Verde quien fue declarado culpable de ese ilícito en perjuicio del Parque Naciones Unidas “El Picacho”.

Por: Luis Alonso Grádiz M.