Alrededor de 14 centavos se ha apreciado la moneda hondureña frente a la divisa estadounidense desde el 3 de enero de este año, en comparación al precio actual que se cotiza en 23.6125 lempiras por dólar.
Entre los factores que están apoyando la apreciación se mencionan los 700 millones de dólares de la colocación de deuda soberana para pagar las deudas de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) y que entraron a la economía en el primer trimestre del año.
También los ingresos por divisas del café que a comienzos de este mes sumaron más de 621 millones de dólares, se suman también los ingresos por remesas que se aceleraron desde el 20 de enero cuando tomó posesión el presidente de Estados Unidos, Donald Trump con medidas anti-inmigratorias.
Sin embargo, a criterio de algunos economistas, la revalorización será fugaz y al regresar a su estado actual los factores antes señalados, la moneda volverá a continuar su camino de devaluación.
El economista del Foro Social para la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), Ismael Zepeda, se pregunta “hasta donde va a aguantar el lempira esta presión, al finalizar el 2016 llegamos a un precio de compra de 23.62 y ahora tenemos el mismo valor”.
Recordó a la par, que a finales de enero de este año la moneda empezó a apreciarse, luego en febrero y marzo continúo, “en pocas palabras subimos y bajamos en la medida en que estamos estabilizados”.
No obstante “existe un ilusionismo del Tipo de Cambio, porque la revalorización se debió a un endeudamiento y las remesas familiares que sumaron más de mil millones de dólares al primer trimestre”.
A partir de ahora queda por esperar el comportamiento que experimentará la moneda en lo que resta del año cuando empiecen a caer los ingresos por divisas del sector agro que a mediados de año llegan a su punto final cuando terminan los ciclos productos de productos no tradicionales y de la caña.
Del 2011 cuando se reactivó la banda cambiaria, el lempira se ha deslizado alrededor del 5 por ciento por año, para el 2017 las condiciones son distintas por la incertidumbre de la administración de Donald Trump, pero el Banco Central de Honduras (BCH) espera que se mantenga el rango anterior del 5 por ciento de depreciación paulatina de la moneda. (JB)