Claves para tener un ambiente de trabajo mentalmente saludable

Un reporte publicado por los expertos en salud y colaboradores del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), Vanessa Candeias y Arnaud Bernaert, muestra la dimensión de este problema.

Y es que según ese análisis, una de cada cuatro personas podría experimentar un problema de salud mental en algún momento de su vida.

La tendencia es creciente, dado que según los investigadores el porcentaje de personas que sufren depresión aumentó más de 18% en el período comprendido entre el 2005 y el 2015.

El ritmo acelerado con el cual se desenvuelven las oficinas, así como las altas cargas de trabajo y las consecuencias de un mundo cada vez más conectado, son solo algunos de los factores que están afectando la salud mental de las personas en este siglo.

Esta situación ha tenido implicaciones directas en la economía según lo ha demostrado en un estudio conjunto de WEF y la Facultad de Salud Pública de Harvard School.

En dicho informe, citado por Vanessa Candeias y Arnaud Bernaert, se explica que el impacto derivado de los trastornos mentales y la pérdida de la productividad va a equivaler a US$16.300 millones entre 2011 y 2030.

Hay casos preocupantes como el de la India, en donde el impacto económico generado por este tipo de enfermedades representa el 22% de la producción económica de ese país.

Revertir esta situación con políticas públicas de salud y otras medidas por parte de las empresas, será una forma “asequible y rentable para promover el bienestar y la prosperidad”, de acuerdo al análisis de Candeias y Bernaert.

Los expertos manifiestan que con solo US$1 de inversión en el tratamiento de patologías como la depresión y la ansiedad, se generaría un retorno de US$ 4 para la sociedad en general.

Una de las incubadoras de estas patologías es el lugar de trabajo, razón por la cual es necesario modificar ciertas prácticas y conductas que en el día a día afectan no solo la estabilidad de las personas sino que también cortan su productividad.

En este sentido, Candeias y Bernaert revelaron algunas claves básicas que todas las personas deberían tener en cuenta para tener un ambiente de trabajo mentalmente saludable en las empresas. Estas son:

Tener la voluntad

No se puede generar un cambio real si desde la dirección de la compañía no existe la voluntad de hacerlo por el bienestar de su gente y de su misma organización.

Explorar el territorio

Los investigadores les recomiendan a los responsables de las empresas que se informen muy bien con respecto al ambiente de trabajo en sus oficinas, ya que cada compañía es un universo aparte y no hay que dar nada por ello.

Esto implica realizar un estudio social con respecto a las políticas que tiene la compañía en la actualidad, lo cual permitirá identificar malas prácticas y errores cometidos en el pasado.

Todo está inventado

Del mismo modo, explican que en materia de políticas para promover la salud mental “no hay que inventar la rueda”, pues ya todo se ha dicho.

Por eso es importante que las compañías estén al tanto de lo que están haciendo las demás en este campo y tomen ejemplo de las mejores prácticas como las aplicadas por organizaciones como Bank of England, Bell Canada; BHP Billiton, British Telecom Group, entre otras.

Saber escuchar

En la actitud de los altos directivos de las empresas está la clave para generar un mejor ambiente de trabajo y tomar medidas a tiempo para mejorar las condiciones de los trabajadores antes de que ocurran hechos de los cuales haya que arrepentirse después.

Por ello, es indispensable analizar el entorno y escuchar muy bien a los colaboradores para conocer las necesidades reales de los empleados.  Una vez identificadas, hay que desarrollar o ajustar una política exitosa de salud mental que se ajuste a la realidad de la compañía.

Trabajo colaborativo

Construir una política robusta en torno al tema de la salud mental requiere del esfuerzo tanto de los altos directivos como de los empleados. Candeias y Bernaert manifiestan que cualquier iniciativa exitosa en este campo se basa en la colaboración.

Por ello será muy valioso si un empleado puede informar al departamento de recursos humanos sobre la existencia de cierto material pedagógico, un programa de capacitación exitoso o la aplicación de cierta herramienta de diagnóstico.

Romper el tabú

Uno de los principales retos en este campo es romper con el tabú que existe alrededor de las enfermedades mentales. Por ello, al interior de las empresas es importante generar una cultura de aceptación y soporte para aquellos que atraviesan un episodio de ansiedad grave o depresión