Las ventas al exterior de melón y sandía habían generado 37.1 millones de dólares hasta el pasado 11 de mayo, similar a los ingresos percibidos en ese periodo del año anterior.
Este año la meta es superar los 53.3 millones de dólares por concepto de ventas en 2016, una caída de 6.2% ($3.5 millones), por baja en el precio internacional (7.1%), según datos del Banco Central de Honduras.
En ese sentido se busca incursionar en nuevos mercados asiáticos, entre estos Japón, donde la fruta hondureña tiene aceptación por la calidad y los niveles de azúcar.
Honduras tiene las condiciones para exportar esa fruta a cualquier parte del mundo sin ningún problema fitosanitario.
El melón hondureño se cultiva en la zona sur y oriental del país, generando una diversidad de empleos directos e indirectos.