“Murió en mis brazos como él quería, no me di cuenta que había fallecido, porque quedó como dormido”, expresó Elizabeth Pinto, compañera de hogar del conocido periodista Gabriel García Ardón (82), quien falleció la noche del pasado viernes, tras luchar contra una enfermedad.
Los restos del exdiputado y exgobernador por el departamento de Cortés, fueron velados ayer en la Funeraria Jardines del Recuerdo, hasta donde llegaron sus más cercanos amigos y conocidos para acompañar a sus familiares.
La acongojada esposa recordó que minutos antes que don Gabriel muriera, lo abrazó como acostumbraba y comenzó a cantarle una alabanza, mientras le acariciaba su cabeza.
“Siempre me dijo que deseaba morir entre mis brazos, pero mientras lo acariciaba le canté y fue cuando expiró; ni siquiera me di cuenta, porque parecía que estaba durmiendo. Gracias a Dios está descansando, aunque nos ha dejado un gran vacío, no puedo creer que se nos haya ido”, comentó Pinto con la voz quebrantada.
Añadió “voy a recordarlo como el hombre alegre que era, colaborador, tengo muchos recuerdos con él que van a vivir por siempre conmigo”.
Cada uno de los asistentes recordaba anécdotas que vivió junto a don “Gabo”, especialmente aquellas acaecidas ejerciendo el periodismo.
Para el caso, el abogado Rafael Emilio Verdial, conocido como “Chavo Verdial”, contó que se conocían con el destacado periodista desde la juventud, pues compartieron momentos de alegría y de tristeza.
“Se va a sentir su ausencia, con Gabriel nos conocimos cuando éramos jóvenes; él fue quien me puso el apodo de Chavo Verdial; para mí fue un gran apoyo, porque estuvo conmigo en los momentos más difíciles de mi vida. Podría contarles muchas anécdotas que vivimos juntos, pues era un hombre de carácter fuerte y en ocasiones nos enojábamos, pero lo que importaba era que en él existía la sencillez encaminada al éxito”, dijo el profesional del Derecho.
Mientras que Julia Esperanza García, sobrina de García Ardón, lo recordó como un gran hombre, “como un periodista de manos limpias que se quitaba el bocado de la boca para dárselo a alguien más. Ha dejado un gran legado en el periodismo y en toda la sociedad que lo conoció”.
TELEDIARIO CONTINUARÁ
Entre tanto, la comunicadora Rosany Núñez, amiga y colaboradora de don Gabriel en el noticiario Telediario, del cual era el director, manifestó que siempre recibía consejos de su parte, especialmente para crecer como profesional.
“Recuerdo que para un Día del Periodista me dijo, negra yo creo que vas a ser una las periodistas más guerreras que va a tener este noticiario (Telediario) y son muchas las anécdotas que han marcado mi vida, casi 25 años trabajando con él”, comentó Núñez.
Agregó que, “nos teníamos mucho cariño y decía que yo era como su hija, pues lo miraba como un padre y es una pérdida irreparable. Lo voy a recordar en cada paso que dé, porque lo que soy se lo debo a él, fue mi consejero, pues era con quien me desahogaba cuando tenía problemas”.
La periodista no pudo evitar quebrantarse, cuando expresó las últimas palabras que escuchó de parte de don “Gabo”, las cuales fueron “te quiero como si fueras mi hija, nunca lo vayas a olvidar, te voy a llevar en el corazón”.
Entre otras cosas que en vida le pidió a Núñez fue que no deje “morir” Telediario, “se lo prometí y se lo cumpliré, porque las promesas no se pueden quedar sin cumplir y el noticiario va a continuar”.
Don Gabriel ejerció el periodismo por 64 años, pues desde muy joven se destacó en esa profesión con gran éxito.
PROFESIONALES DE ÉXITO
Estuvo al frente de su noticiario por 47 años, primero en canal 7 de Telesistema hasta agosto de 2013, donde permaneció al aire por 44 años, luego en TeleProgreso y por último en TVH, contribuyendo con la formación de hombres y mujeres que ahora son profesionales de éxito.
Como gremialista fue uno de los fundadores del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), que le otorgó el Premio Álvaro Contreras (2004-205), pero igualmente fungió como presidente del Capítulo Noroccidental de esa misma organización en San Pedro Sula.
Fue diputado en dos ocasiones y gobernador de Cortés, en representación del Partido Nacional. También en su momento aspiró a convertirse en alcalde de la ciudad industrial.