Aunque los menores de 16 años ya no puedan contraer matrimonio con la autorización de sus padres, dicha reforma al Código Penal no impedirá que más adolescentes sigan teniendo relaciones sexuales, advirtió la fiscal de protección a la niñez, Marisol Rodríguez.
Por lo tanto, la funcionaria enfatizó en la importancia de continuar trabajando en la prevención de los embarazos en las adolescentes.
Se busca “el empoderamiento de los niños y las niñas desde la escuela, sobre el tema de sexualidad y los métodos de prevención de embarazos, pero los jóvenes van a seguir teniendo relaciones, no les va limitar seguir tenido relaciones, el Código Penal no tipifica esto como conducta de delito”, señaló la fiscal.
Destacó la decisión del Congreso Nacional (CN), en la derogación del tercer párrafo del artículo 16 del Código de la Familia, que permitía que niñas mayores de 16 años se casaran con la autorización de sus padres.
“Con la derogación de este artículo no estamos atacando los factores de riesgo de las relaciones sexuales, al tener embarazos prematuros que ponen en riesgo la vida de las jóvenes; no están desarrolladas por completo para poder dar a luz”, concluyó Rodríguez.
El CN aprobó el proyecto de ley que castigará con cárcel las relaciones sexuales con menores de edad, dependiendo de la diferencia de edad.
Los adultos que sostengan relaciones con adolescentes entre 15 y 18 años se expondrán a una pena que oscilará entre dos y tres años de cárcel, siempre que el adulto le lleve una diferencia de siete años.
En el caso de vínculos sexuales con menores entre 13 y 15 años, el plan castiga a los adultos con cárcel de tres a seis años, cuando la diferencia de edad sea de cinco o más años.