¡Cuando las esposas se encachimban!…

¡Cuando las esposas se encachimban! Ese es el título del nuevo libro de mi amigo el escritor Ubence Soroguara, tipo ágil en la palabra y muy bien escritor. “Cuando las mujeres se encachimban es la historia de un hombre que hacía lo que le daba la gana en su casa, cachimbiaba a su mujer cada 24 horas”, la vieja siempre andaba con la trompa hinchada se parecía a los chanchos gringos, rosadotes que tienen un pico que mis respetos.

Un día la mujer se cansó de ser víctima de aquel desgraciado que la pateaba, barría el patio con ella, las orejas como coliflor, la nariz quebrada y aplastada. Una noche llegó cara de chaco o sea bolo, ella lo recibió con cariño, él le pegó un macanazo en el pico como saludo, ella chorriando sangre le dijo: Amorcito le tengo un litro de guaro para que no salga, para que se quede conmigo en la casa aunque me pegue.

Cuando vio el litro de guaro se alegró: “puchica vos sos la mejor mujer del mundo, por eso te cachimbeo de cariño, servime un trago cargado”, la mujer le llenó un vaso de guaro, le partió un limón y le puso sal, a tucun se metió el guaro ese bárbaro, sin arrugar la cara y sin escupir para afuera. “Servime el otro que estoy más seco que un adobe”, -lo mismo amor?- lo mismo vieja.
Ay papita, cuando el guaro hizo su efecto el hombre no pudo llegar a la cama y cayó al piso, inmediatamente la mujer lo amarró de pies y manos, lo agarró a patadas, lo cacheteó, luego salió a la calle, había llamado a un primo de ella que era taxista para seguir con su plan, entre los dos metieron al bolo cachimbiado en el asiento trasero del taxi y arrancaron con rumbo desconocido”.

Cuando el cachimbiado despertó estaba al otro lado de la frontera con Nicaragua, ahí nomás lo toparon los sandinistas y lo llevaron al mamo, como lo encontraron golpeado dijeron: chocho este es el asaltante que cachimbiaron en Somoto, llévemelo. Bueno esa es parte de la novela cuando las mujeres se encahimban. Dice mi amigo que está escribiendo otro libro que se llama “Estas preñada pero no es mío”, es la historia de miles de mujeres que se entregan por amor a un pícaro creyendo que las aman, cuando salen panzonas el picarito pregunta ¿y de quién es?, ese cipote no es mío… a saber con quién te acostaste… hace cuenta que nunca me has visto y que no sabes mi nombre, ay nos vemos.

Le dije que esos serían éxitos de librería. También me enseñó un ensayo sobre otro tema de actualidad: “Bota ese celular y hacete para acá mamaíta”, dice que en su casa nadie habló, desde el chiquitín de cuatro años todos están con el celular, la mujer chateando con sus amigas, nadie le para bola. No me lo vas a creer –me dijo- pero he contado las veces que le he dicho bota ese celular y hacete para acá mamayita… ya llevo cinco mil trescientas veces que le digo eso, y nada papa, o sea que los celulares son los nuevos rivales de los hombres, ella jamás me había quemado la pata hasta que aparecieron los celulares, es una brama con ese celular que yo ya se lo di por marido, por lo menos me sirve de inspiración para escribir mis libros ahh y fíjate que ahora que las cipotas salen panzonas desde los 12 años tengo una obra de teatro que se llama: Me brinca la rana… yo tengo una mente privilegiada para escribir, hacer obras de teatro, libros, ensayos, pastorelas en fin, ahora estoy esperando siempre una fuente de inspiración.

Te bajaste al pozo, esa es otra obra inspirada en un baboso que yo conocí y que jamás creí que era jefe de una mara, ahí lo miré que lo llevaban para el pozo… te fijas como me llega la inspiración, él solito se bajó al pozo con las cosas que andaba haciendo. Ya días me inspiré en otra cosa, llegó mi hermano a la casa y para descansar se quitó los tenis… cállate hombre, una bomba lacrimógena de esas que Maduro le lanza al pueblo venezolano se queda chiquita, todos sentimos un ahogo espantoso, te lo juro que pensé que ahí nomás me iba a palmar, pero por suerte nadie murió ahogado, cuando mi hermano se quitó los tenis… sabes como se llama la obra que escribí: La pata juca ataranta pero no mata.

Le dije a mi amigo que lo admiraba por su talento y me respondió: Gracias por reconocerlo, ahorita estoy pensando en las alianzas, o sea que en realidad no se trata de oposición sino que se trata de miedo, le tienen terror a JOH, o sea que JOH es como un monstruo que se los quiere comer con todo y zapatos, dice un refrán que Dios los cría y el diablo los junta. Los de la alianza ya consiguieron un títere, el pobre no sabe que lo están manipulando con gran habilidad, por muy vivo que se crea uno siempre sale más vivo. Por eso a escribir el libro: No me hace nada culebra.

Otra cosa querido amigo, hay otro proyecto que se llama “Se levantó el muerto” es por el Partido Liberal, vea no les de un sorpresa, no todos los de Libre están de acuerdo con que Salvador Nasralla los represente, ellos querían a Mel o a doña Xiomara y no es lo mismo un extraño. O sea que los liberales se van a ver fortalecidos por miembros del PAC resentidos y miembros de Libre enchacimbados, eso va a ser un despelote, la obra se llama como ya te dije “Se levantó el muerto”. Le di las gracias a mi amigo el escritor y dramaturgo y vamos a ver qué pasa señores.