Más de 2,380 muertes de infantes desde el 2011

Existe una demostrable deuda con la infancia de Honduras por parte de los operadores de justicia en el país, ya sea de la Policía Nacional, Ministerio Público (MP) o Corte Suprema de Justicia (CSJ), solo es de preguntar en cada ente de más de dos mil muertes violentas en perjuicio de menores de edad, cuántos casos han llegado a sentencia condenatoria en tribunales, la respuesta común es que la mayoría siguen impunes.

A diario llegan denuncias no solo al MP, sino que también ante Organizaciones defensoras de los derechos de los niños y niñas quienes remiten algunas denuncias a este ente del Estado y a la Dirección Nacional de Niñez Adolescencia y Familia (Dinaf) sobre actos en donde se perjudica la vida del menor o abusos de todo tipo a los que son sometidos en su entorno.

El Centro de Medicina Legal y Ciencias Forenses, registra que desde 2011 a junio de 2017, son 2 mil 380 autopsias practicadas a menores de edad, muertos por armas de fuego, intoxicados, por golpes, accidentes de tránsito, por arma blanca, por supuestos suicidios, violaciones sexuales entre otros.

Solo en el 2017 más de 164 casos se han registrado, muchos de estos son las consecuencias de la violencia generalizada en el país y por omisión de cuidados por parte de los padres de familia, tutores o responsables de los infantes, cuyos cuerpos revelan en las mesas de las autopsias los diferentes daños que sufrieron antes de morir y en muchos casos hasta arrastraron por varios años, como por ejemplo los maltratos físicos, enfermedades crónicas y evidente desgarramiento de sus genitales a causa de violaciones, casos que aún no llegan ni a la etapa investigativa.

Un exagerado número de la población infantil de Honduras, evidenciados en las morgues demuestra la deuda del país en atención al derecho a la vida de los niños.

Si bien la Fiscalía Especial de la Niñez conoce desde enero a la fecha 71 denuncias por violación especial (a niños niñas o adolescentes) a penas algunas capturas de los victimarios se registran y de manera escueta se informa al respecto, aunque prevén mayor agilidad de esos expedientes “apilados” por años atrás y meses recientes con la atención inmediata por medio de la unidad especial creada en el MP.

“(…) dependiendo las circunstancias en las que se denuncian los hechos y si la víctima está en una situación de crisis se le atiende de manera inmediata por el Módulo de Atención Integral del Ministerio Público que incluye el trabajo de psicólogos y trabajadores sociales”, informó ayer la portavoz del MP, Lorena Cálix.

Explicó que ante las denuncias de este tipo se le sigue una orientación jurídica y técnica por parte de los fiscales hacia la víctima, “por supuesto dependerán de la edad de la víctima y de las personas que le acompañan a interponer la misma, lógicamente se investiga los casos en contra de la libertad sexual, amplió.

Mientras continúan acumulándose las denuncias en el MP y Policía Nacional, los casos en espera de justicia en la Corte Suprema, el doble de estas cifras se proyectan en la cantidad de pequeños cadáveres en las morgues de Tegucigalpa, San Pedro Sula y La Ceiba.

El Centro de Medicina Legal y Ciencias Forenses, realiza estudios sobre la violencia infantil, las causas, formas de muerte y armas comunes utilizadas.
Si bien las niñas representan una minoría en materia de muertes registradas, estas al igual que los niños sufrieron violencia sexual y omisión de cuidados antes de sus decesos.