Conductores de “rapiditos” se paralizan por rapto de compañero

Un grupo de conductores de autobuses del servicio ejecutivo, mejor conocidos como “rapiditos”, de la ruta Los Pinos y Villanueva, sector oriental de Tegucigalpa, decidieron paralizar sus labores por las insoportables amenazas de pandillas y bandas dedicadas al cobro de extorsión al rubro transporte.

La “gota que derramó el vaso” y para que los transportistas tomaran la decisión de no prestar el servicio sucedió este martes, al momento que malvivientes raptaron a uno de los motoristas, llevándoselo con rumbo hasta ese momento desconocido.

Los extorsionadores raptaron al conductor, como medida de presión para que los demás “buseros” reunieran una cuantiosa suma de dinero.

Por tal razón, los motoristas, al filo de las 9:00 de la mañana, decidieron no seguir prestando sus labores, debido a que fueron amenazados y que serían ultimados al menos dos conductores si los afectados no cedían a sus presiones de terror para que se pague el dinero de la “renta”.

En horas del mediodía, el motorista raptado reapareció, dando aviso a sus compañeros de labores.

Sin embargo, llevó la mala noticia que varios empleados del transporte serían ultimados si no accedían al pago del mal llamado “impuesto de guerra”.