Llegó el momento de invertir en Zonas de Empleo
Hace dos semanas, el Presidente Juan Orlando Hernández participó como testigo en la inauguración de una planta de la empresa canadiense Gildan en Choloma, Cortés, que generará mil 200 nuevos empleos.
“Hay muchas otras empresas como Gildan que están a la espera de invertir en Honduras. Solo necesitamos reglas claras”, dice el empresario Jesús Canahuati, presidente de Elcatex Corporation, que emplea a más de 6 mil trabajadores directos.
Las trabas burocráticas y la inseguridad jurídica han provocado que muchas empresas internacionales prefieran invertir en otros países y no en Honduras. Eso ha llevado al Presidente Juan Orlando Hernández a idear las Zonas de Empleo.
Estas zonas especiales son actualmente zonas de pobreza, de marginación, de exclusión social y productiva. ¿Esto es lo que queremos para Honduras? No. Lo que queremos es una Honduras desarrollada, competitiva, altamente productiva, pujante y con seguridad ciudadana y jurídica-agrega.
El panorama de inversión para Honduras es alentador, por lo que hizo un llamado para dar lo que llamó “el gran salto” para impulsar las Zonas de Empleo que propone el Presidente Juan Orlando Hernández con el objetivo de crear miles de fuentes de trabajo.
Canahuati es uno de ellos y señala que comparte el mensaje del mandatario hondureño para dar el gran salto en materia de generación de inversión y empleo y que para eso es fundamental que se impulsen las Zonas de Empleos.
“Si damos ese gran salto estaremos creando miles de fuentes de trabajo”, dice Canahuati, ganador del Forjador 2016, el premio más importante que entrega la empresa privada hondureña. Se lo otorgaron por su contribución al desarrollo del país.
En iguales términos se refiere Francisco Ordóñez, presidente de la Federación Nacional de las Cooperativas, quien sostiene que el clima de estabilidad que hay actualmente en Honduras es propicio para implementar las Zonas de Empleo.
“Las Zonas de Empleo estarán sujetas a la Constitución de la República, en asuntos de soberanía, aplicación de la justicia, territorio, defensa nacional, relaciones exteriores, temas electorales y emisión de documentos de identidad”, explica Hernández.
Además, tienen otras características especiales: personalidad jurídica, están sujetas a un régimen fiscal especial, pueden contraer obligaciones en tanto no requieran para ello la garantía o aval del Estado, están facultadas para celebrar contratos para cumplimiento de sus objetivos en el tiempo y durante varios gobiernos.
También gozan de autonomía funcional y administrativa que deben incluir las funciones, facultados y obligaciones que la Constitución y las leyes le confieren a los municipios.
“Estamos listos para que, con toda esa infraestructura que hemos construido en Honduras, instalemos las Zonas de Empleo y podamos traer la inversión masiva de otros países y que la gente tenga la oportunidad de empleo que van a buscar a Estados Unidos porque aquí van a poder tener empleos”, afirmó Hernández.
Por su parte, el banquero Camilo Atala está de acuerdo en que las Zonas de Empleos son “Alternativas que tienen tanto los inversionistas nacionales como internacionales. Pero para eso, los nacionales debemos dar el ejemplo de inversión; eso nos ayudará a generar mayor cantidad de empleos”.
En iguales términos se refiere Luis Larach, presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) al señalar que “las Zonas Especiales le quitan mucha burocracia administrativa y también en la parte regulatoria e impositiva a las empresas que se radican en estas zonas y creemos que va a dar un buen resultado”, argumenta.