Al menos 757 casos de familias y de particulares de diversos sectores del país, se han visto obligados a salir de sus hogares por causas que van desde amenazas a muerte, extorsiones y el reclutamiento forzado de niños y adolescentes por parte del crimen organizado.
Esta problemática fue expuesta por el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), en el marco de Conferencia Regional sobre el manejo Integral Regional para la Protección y Soluciones del Desplazamiento Forzado.
La Conferencia Regional se celebra hasta hoy, en la ciudad de San Pedro Sula, con el auspicio de la Organización de Estados Americanos (OEA), el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la participación de instituciones gubernamentales que velan por los derechos humanos y organizaciones no gubernamentales (ONG) instaladas en Honduras.
Esta conferencia se realiza en el contexto de la Declaración de Nueva York para los Refugiados y Migrantes, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas, en septiembre 2016. El objetivo primordial es fortalecer la respuesta regional de protección, a través de la adopción e implementación del Marco Integral Regional de Protección y Soluciones (MIRPS), como aplicación práctica del Marco de Respuesta Integral para los Refugiados (CRRF, por sus siglas en inglés).
Según el Conadeh, se determinó que el 39.5 por ciento de desplazamientos forzados ocurrió por amenazas de muerte, el 18.5 por ciento por extorsión, el 13.2 por ciento por asesinato de familiares y el 8.2 por ciento por el reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes.
En ese sentido, el encuentro prevé consolidar y promover alianzas regionales para acordar una respuesta integral de protección a los refugiados.
Al respecto, el comisionado Roberto Herrera Cáceres declaró que la meta principal de la Conferencia Regional de San Pedro Sula es fortalecer la respuesta regional al desplazamiento, a través de la adopción e implementación del MIRPS.
Este marco integral representará una contribución de la región al desarrollo del Pacto Mundial sobre Refugiados, que será considerado para la adopción en la 73ª Asamblea General de la ONU, en el 2018.
Expresó que en Centroamérica, pese a que no hay campamentos, se han renovado los desplazamientos forzados internos de personas y que, hasta ahora, solo el Estado hondureño ha reconocido ese fenómeno.