“Rapidito” arrolla a niño de cinco años en Comayagüela

Un menor de apenas cinco años de edad murió trágicamente este viernes, tras ser atropellado por el conductor de un autobús del servicio ejecutivo, denominados “rapidito”, que transitaba por la primera avenida de Comayagüela.

El pequeño Michael Isaías Hernández era el hijo de una vendedora ambulante que se gana la vida honradamente en esa arteria vial de la capital.

El trágico accidente se registró frente a los puestos que la semana anterior resultaron quemados, donde varias unidades de transporte urbano hacen parada para volver a retomar sus rutas capitalinas.

Al parecer, el menor salió de entre varios buses amarillos que estaban estacionados y se cruzó la calle sin percatarse que por el lugar transitaba un bus «rapidito» de la ruta El Hato-Los Robles, según lo relatado por el conductor que fue detenido por la Policía para investigación y que responda por el percance.

“Yo iba por el carril izquierdo, cuando yo voy a la par del bus amarillo estacionado solo veo que el niño se cruzó la calle y ya estaba de frente, y yo no pude hacer nada porque lo tengo de frente y desgraciadamente pasó lo que pasó”, reiteraba en su defensa el motorista, Gabriel Sánchez.

“Nadie quiere quitarle la vida a nadie y peor a un niño, por eso les digo que yo no me siento culpable de lo que pasó, porque nadie quiere causar este tipo de accidentes”, relataba el conductor con siete años de laborar como chofer de “rapiditos”.

El hombre sumamente asustado y compungido por la muerte del menor, explicó que no iba a exceso de velocidad y lo que “más me fregó es que una llanta arrastró al niño” y “ahí están los pasajeros de testigos que yo no quise matar a ese niño”.

Tras el percance, el motorista estacionó la unidad y se entregó a las autoridades policiales que cuidan ese sector capitalino. A los minutos de ser atropellado, el infante todavía presentaba signos de vida y fue trasladado en una ambulancia al Materno Infantil de Tegucigalpa, donde lamentablemente falleció a consecuencia de los golpes sufridos.

El lamentable accidente vial sucedió en la primera avenida de Comayagüela, cuando un niño de cinco años murió atropellado por esta unidad de transporte.