Por: Jubal Valerio Hernández
En las campañas políticas anteriores, aunque de manera un tanto superficial, se ha mencionado el tema de los valores en los planes de gobierno que han hecho públicos los candidatos a las elecciones para la Presidencia de la República.
En la actual campaña electoral, he podido escuchar a algunos de los candidatos hablar sobre este tema y también leído las propuestas de los que han presentado por escrito sus planes de gobierno.
Así por ejemplo, en el plan de gobierno que presenta la Alianza de oposición contra la dictadura, no existe un capítulo específico sobre el tema de los valores, aunque en la propuesta sobre el tema de la cultura, se podría decir, forzando un poco el concepto, que está subsumido en el párrafo que dice: “Transversalización de la cultura en todo el accionar de nuestro gobierno (lo cual me parece bien) y compromiso con la memoria histórica, generando espacios de reflexión y análisis crítico sobre la violencia política del pasado reciente, que permita generar mecanismos de reparación simbólica a las víctimas”.
El concepto contenido en el párrafo anterior, es inaceptable, por cuanto tiene un carácter reduccionista, ya que se pretende reflexionar y analizar la violencia política, de un período que comenzó en el 2009. Y la violencia política de las décadas anteriores y aún de la época republicana? No debería ser objeto de reflexión y análisis? Si vamos a construir una nueva sociedad, debemos de estudiar la historia de manera completa y objetiva. Resistirá el análisis, la actitud de muchos docentes que en la segunda mitad del 2009, exigían a los niños que cantaran el Himno Nacional con el brazo levantado y el puño cerrado, en vez de poner la mano en el corazón, lugar en el que todo hondureño bien nacido lleva a su patria?
En su plan de gobierno, el candidato del Partido Liberal, ingeniero Luis Zelaya Medrano, en el capitulo IV, relativo a la educación, expresa lo siguiente: “Educación en valores. Dado que la educación es más formativa que instructiva, es elemental fomentar los valores desde la niñez y la juventud, para que hagan la combinación perfecta de aptitud y actitud. Fortaleceremos los valores éticos, cívicos y morales en todos los diseños curriculares”. A esto, Zelaya Medrano, agrega en varios discursos y proclamas que le he escuchado, los valores espirituales, saliendo al paso a los que le han pretendido achacar que con esto lo que va a ocurrir es que se le quitará el carácter laico a la educación. Zelaya dice, “no confundamos la religión con la espiritualidad”. “Los niños y sus padres, necesitan de una transformación espiritual, partiendo de que el núcleo fundamental de la sociedad es la familia”.
Del plan de gobierno del candidato del oficialismo, no conozco cuál es la forma de abordar este tema de los valores, porque no he podido conseguir el documento que contiene el referido plan. Por eso, me refiero ahora, aunque sea brevemente, al tema de los valores en la práctica política. Quién de los candidatos, me pregunto, resiste más el análisis y aprobación de los electores, en cuanto a los valores que dicen practicar?
Con todo respeto para los otros candidatos con posibilidades de obtener un resultado favorable en la votación, creo que Luis Zelaya Medrano, nos muestra de manera diáfana, con evidencias y credenciales académicas, científicas y éticas, que está calificado y con altas notas, para presentarse ante la ciudadanía y obtener su respaldo para convertirse en el próximo presidente de la República. La gente quiere un verdadero cambio. Este aún no ha llegado y solo con un escenario y actores diferentes, se puede lograr. Reflexionemos cómo vamos a votar, ciudadanos, este 26 de noviembre después no nos quejemos de un gobernante con conductas erráticas o actitudes dictatoriales, porque solo nosotros seremos los responsables de que ocurra lo mejor o lo peor. Para esta querida patria nuestra, digna de mejor suerte.