Unas 112 familias de Namasigüe, Choluteca, se beneficiaron con semillas de maíz y frijol, asistencia técnica en producción agrícola y fortalecimiento de cajas rurales, a través del proyecto “Fortalecimiento de las buenas prácticas agrícolas en cultivos de maíz y frijol biofortificados”.
Con el objetivo de crear resiliencia y adaptación al cambio climático mediante la mejora y aumento de los medios de vida y oportunidades de trabajo, del conocimiento en gestión de recursos naturales, empoderamiento de las comunidades en toma de decisiones sobre el uso de los recursos naturales.
Además del fortalecimiento de los gobiernos locales para abordar las causas y efectos del cambio climático, sobre un manejo sostenible de las actividades, dicha iniciativa se ejecuta de octubre 2016 a septiembre 2018.
Los alimentos biofortificados son aquellos que mediante técnicas de fito mejoramiento logran incrementar su contenido nutricional, con el fin de mejorar la calidad de vida de quienes los consumen.
Este programa es desarrollado por la Dirección de Ciencia y Tecnología (Dicta) que ha liberado diferentes variedades de granos básicos y hortalizas para que sean cultivadas en el corredor seco de Honduras y mejorar la seguridad alimentaria de la región afectada por el cambio climático. (JAL)