El que esté libre de culpa…

Me siento, auténticamente indignado por la nueva crisis que han creado, principalmente Juan Orlando Hernández, inscrito ilegalmente por el Tribunal Supremo Electoral, y la oposición chavista de Manuel Zelaya Rosales. Aún Salvador Nasralla y Luis Zelaya tienen pizca de culpabilidad. Salvador Nasralla, más que pizca, como cómplice al haberse aliado al partido Libre, cuyo coordinador general, el expresidente Zelaya Rosales que tanto daño le ha hecho al país, a sabiendas de su desmedida ambición continuista estilo socialismo del siglo XXI y que además  tiene cuentas pendientes con la justicia de Honduras, por evidentes y supuestas irregularidades de todos conocidas; también Salvador Nasralla por haberse declarado ganador y presidente de Honduras, igual que JOH, antes de conocerse el resultado oficial del TSE, después de contar el 100% de las actas, como ellos mismos deseaban; además, ha asumido el mismo comportamiento del jefe, de defender “pacíficamente” en las calles una victoria aún no ganada oficialmente.

Nasralla sabe perfectamente que hasta el último segundo del tiempo extra de un partido de fútbol cuenta; claro, en el fútbol no hay tendencias pero sí probabilidades.
El candidato del Partido Liberal, Luis Zelaya,  que muestra que aún no se ha convertido en un verdadero líder, corrió a felicitar, apoyar y reconocer como presidente de Honduras a Salvador Nasralla, en vez de llamarlo a la cordura, prudencia y esperar pacíficamente el resultado final del TSE, avalado por observadores nacionales e internacionales.

El partido Alianza Patriótica igual que FAPER fueron inscritos ilegalmente por el TSE, amparados en una resolución espuria de la Corte Suprema de Justicia, que ratificó el error y parcialismo de la CSJ anterior, ente incompetente, allanando el camino a JOH para que se lanzara a la reelección, a todas luces inconstitucional.

También los apologistas y colaboradores cercanos de ambas partes en conflicto son parte del problema e igual algunos medios de comunicación sesgados.

En resumen: la reelección de JOH es inconstitucional y consecuentemente su inscripción es ilegal; la inscripción de la Alianza Patriótica y FAPER también es ilegal; el expresidente Zelaya siempre estuvo de acuerdo con la reelección, aunque ilegal; el TSE también es responsable en gran medida de la actual crisis; Salvador Nasralla ahora, indirectamente, es parte de la corrupción que tanto fustigó y del desorden y la violencia que ha caracterizado a Libre; finalmente, si hay alguno de los principales actores libre de culpa, que lance sapos, culebras, arañas, medusas y mentiras, que el pueblo lo aguanta y tolera, pero es inaceptable que lancen piedras y bombas incendiarias que destruyan la propiedad privada, el patrimonio nacional y nos roben la relativa paz y tranquilidad que se ha logrado.

Luis A. Paguaga M.
La Tribuna Online