Hernández llama a un consenso nacional que permita trabajar en un nuevo país

El Presidente de la República, Juan Orlando Hernández, compareció ayer martes en una cadena de radio y televisión, en la que consideró necesario la construcción de un consenso nacional para trabajar en un nuevo país y dijo estar abierto a un hacer, un acuerdo nacional que consolide la paz y la seguridad para todos.

De esa manera Hernández refirió que “como Presidente electo, extiendo mi mano y abro mi mente para escuchar con atención a los demás y acordar en un gran diálogo el ´Acuerdo Nacional´ que consolide la paz y la seguridad de todos los habitantes de la República, que fortalezca la ruta de la estabilidad y el crecimiento económico y propicie profundas reformas sociales e institucionales”.

“La patria nos convoca a todos a crear ese país de paz, seguridad, oportunidades, prosperidad y justicia que deseamos”.

Acuerdo que busca fortalecer la ruta de la estabilidad y el crecimiento económico y propicie profundas reformas sociales e institucionales.

“Es claro para mí que las pasadas elecciones revelan una recomposición del terreno político y la necesidad de construir, con el concurso de los hijos de esta tierra bendita, un consenso nacional que nos permita trabajar en un nuevo país”, dijo Hernández.

Reconoció que los resultados del proceso electoral fueron estrechos a nivel presidencial, “sin embargo, la decisión de los electores consolidó una bancada preminente en el Congreso Nacional, igual hay una expresión electoral mayoritaria a nivel de las alcaldías”.

Pero considero que “esos resultados no deben ser usados para proclamar división. Los resultados electorales tampoco deben ser utilizados para instigar odio ni destrucción. Los recientes resultados electorales nos deben mover a todos los hondureños a una profunda reflexión”.

En cambio, dijo que los resultados deben ser usados para que cada uno de nosotros haga un examen de conciencia y su acto de contrición. “Es el momento de limpiar el alma de nuestras propias culpas y de aclarar el alma de cualquier culpa que atribuyamos al contrario”.

“…Es el momento de reiniciar el camino del entendimiento nacional, de la integración de la familia hondureña y de la unidad de propósitos. Honduras nos reclama un reencuentro nacional de todos los sectores de la sociedad. Sentarnos a la mesa para definir en conjunto los objetivos fundamentales que como nación debemos señalar y perseguir”.

Detalló que “no es el tiempo de recriminar sino el de acercarnos. Es tiempo de construir el mañana que es nuestro, el nuevo amanecer que debe alumbrar a nuestros hijos y a las futuras generaciones”.

En su mensaje manifestó que “en el pueblo residen la soberanía popular, el pueblo hondureño ha hablado” y destacó que “a quienes participamos en la pasada contienda electoral solamente nos queda acatar la voluntad popular libremente expresada”.

Pero también consideró que “la aceptación de la voluntad de cerca de tres millones y medio de hondureños, traerá paz, concordia y progreso”.

ACEPTA CON HUMILDAD LA
VOLUNTAD DEL PUEBLO

La comparecencia de Hernández se produjo luego que el Tribunal Supremo Electoral (TSE), hiciera la declaratoria oficial de las elecciones generales el pasado domingo, donde gracias a la voluntad del pueblo demostrada en las urnas, fue electo como Presidente de la República para el período (2018-2022).

“Como ciudadano y Presidente electo de todos los hondureños, acepto con humildad la voluntad del pueblo hondureño”, al tiempo que considero que “no es momento para triunfalismos.

Tampoco es momento de celebraciones, pero sí es momento de agradecer desde el fondo de mi alma, a todos aquellos ciudadanos que confiaron en mí, que me apoyaron decididamente”.

Apoyo que se produjo pese a la “intimidación que ejerció el crimen organizado, a pesar de los riesgos personales y familiares, a pesar del arduo esfuerzo que se requirió durante muchos meses del proceso electoral”.

“… Sé que han hecho muchos sacrificios y han arriesgado hasta su integridad personal por defender la democracia y el derecho de elegir y ser electos”.

Así, se dirigió a la nación “a todos ustedes, ciudadanos hondureños, nacionalistas, independientes, miembros de otros partidos, hombres, mujeres, jóvenes y adultos mayores, a todos sin excepción alguna, mi gratitud imperecedera”.

En su alocución se comprometió a “no defraudar su confianza, de honrar su esperanza con mucho trabajo, con mucha dedicación, con total determinación para construir de la mano de Dios y del pueblo hondureño, una nueva Honduras”.

“Mis pensamientos como Presidente electo van también para todos aquellos que no votaron por mí, para todos aquellos que eligieron otras opciones electorales, para quienes han hecho oposición cívica”, dijo Hernández.

LLAMADO A MANIFESTANTES

Pero también hizo un llamado a quienes han protestado con violencia en las calles para que “hagan uso del legítimo derecho a la manifestación pacífica respetando la integridad física y los bienes de los demás ciudadanos”.

“Ninguna protesta justifica poner en peligro la vida de otros hermanos hondureños. Tampoco puede ser expresión legítima de la protesta el vandalismo, el pillaje o la destrucción de la propiedad pública y privada” y declaró que “en una democracia, los ciudadanos estamos sometidos al imperio de la ley, el respeto a la autoridad y a las exigencias de la sana convivencia social”.

Hernández reiteró uno de sus compromisos permanentes: “Por encima de las diferencias de partido, más allá de las ideologías, por sobre las preferencias electorales, todos somos hijos de una misma madre: Honduras; a todos nos acoge la misma tierra, a todos nos cobija el mismo cielo. Somos hermanos”.

En ese sentido, consideró que a pesar de nuestras desavenencias, nos une un pasado común, nos abraza el mismo presente y sobre todo nos espera el mismo futuro como nación”.