Lo único mejor que escribir es leer. Nos permite a los menos dotados como escritores, disfrutar del sentimiento transmitido por los que sí saben hacerlo. La palabra escrita es la memoria del tiempo. Nos recuerda lo vivido y nos ilustra. Leyendo me vuelvo interesante, pues mi conversación contiene la sal y el chile que da sabor a la experiencia, aunque sea ajena. Gracias a Dios por los que escriben y por los que publican. Son mi túnel del tiempo, mi ventana al mundo!
Enrique Girón
La Tribuna Online
