Madre e hija pierden la vida al ser arrolladas por volqueta

Potrerillos. Eran la 1:30 de la tarde cuando madre e hija se habían bajado de un bus que las traía de San Pedro Sula hacia Potrerillos. Ambas caminaban sobre la entrada principal del municipio cuando fueron sorprendidas y arrolladas por una volqueta que les quitó la vida casi de manera inmediata.
PERCANCE
El trágico accidente se registró, según las autoridades policiales, en la parada de buses llamada “La Piedra” exactamente ubicada en el barrio Lempira. Las infortunadas fueron reportadas como María Alicia Corea (44) y su hija quien tenía 10 años.
Los testigos indicaron a los agentes de investigación que supuestamente la volqueta blanca con placas AAC 3868, conducida por Elvin Neyib Oviedo iba rebasando al chofer de la mototaxi Jorge Mejía y de pronto perdió el control y se llevó de encuentro a las dos personas. El pesado carro fue a quedar varado en una casa en donde vende ropa usada y afortunadamente no había personas en el garaje de la vivienda. El sargento del Cuerpo de Bomberos, José Mauricio Bueso dijo que a la 1:45 les reportaron el accidente de tránsito, luego se trasladó personal de la estación y confirmaron que había dos víctimas mortales. Detalló que salió una persona herida que fue trasladada en un carro de la Cruz Roja hacia el hospital Mario Catarino Rivas.
LUTO Y DOLOR

El sargento detalló que la volqueta venía de norte a sur y que no saben las razones por las que impactó contra la unidad de transporte. Los conductores de ambos vehículos fueron requeridos por la policía para efectos de investigación. Por su parte el motorista de la mototaxi, Jorge Mejía mientras estaba en el interior de una patrulla, manifestó que “yo vengo haciendo mi vía para el centro de Potrerillos y vi que la volqueta venía rebasando, vengo casi en el otro carril y de pronto sentí que me impactó y me dio vueltas con todo y la mototaxi. No vi cuando se llevó a las personas”. Los familiares de María Alicia recordaron que ella tenía más de 20 años de dar clases en varias instituciones educativas. “Ella trabajaba en un kínder de potrerillos Sulay Garay de Pineda y su hija iba a sexto grado. Nos duele mucho lo que les pasó”, dijo Hermes Corea, hermano de la señora.