Presidente virgen de América

“Presidente virgen de América” fue una agudeza de irónica tolerancia con la cual se designó al político peruano Víctor Raúl Haya de la Torre (1885-1979), por candidatear tantas veces a la presidencia del Perú y no haberla obtenido. Haya de la Torre, intelectual, orador vigoroso y profundo, notable antiimperialista y fundador de la Alianza Popular Revolucionaria Americana APRA tuvo que tolerar su castidad presidencial precisamente a causa de su radicalismo marxista, que le originó persecuciones, destierros, asilo, encierros, ardides y golpes de estado provocados para impedir su ascenso al poder. Fue un Allende frustrado. En nuestro derredor ocurren desengaños similares: Doña Hilaria Clinton en el norte, quien perdió la Casa Blanca con mayoría de votos, de la que ya fue ama de casa una vez. López Obrador, al sur del muro, que al perder por un cachito instaló su palacio nacional en una carpa en el Paseo de la Reforma. El Nobel Vargas Llosa, que encandilado por la vanidad ya contaba con su traje de toma de posesión confeccionado en París y aún lo guarda en una bolsa plástica. Puigdemont, en el levante catalán, quien será investido en prisión. Hubo el caso de un presidente momificado que traspasó el mando atiborrado de formalina y, por acá, también le tocó al “caudillo” del liberalismo quien no llegó a la Presidencia porque anunció que colgaría de los pinos del país a todos los verde oliva que se encontrara y, en su segunda oportunidad, se le terminó el hilo de la rueca. Y ahora, Sancho amigo, cosas veredes en “estas honduras” que harán hablar las piedras: en unos días tendremos otro “presidente virgen”, cuando Nasralla Salum tome posesión en el campo de La Isla y se instale hasta el primer aguacero en una champa en el Cerro Juana Laínez, con una banda presidencial prestada, desde donde lanzará su primer decreto presidencial (X0-001-18) condenando al imperialismo que lo mantiene célibe por dos veces y declarándose putinista, opus deísta, bolivarianita…, y aprobando el matrimonio GLBTQIA, el aborto, la mariguana, quemar los Marriott y que en la UNAH los muchachitos pasen los exámenes con nota del 50%…
Y Morazán vigila…
Mauricio Babilonia
Cerro Juana Laínez
Estas Fondvras