Por favor no exagerar, es anual

En titular de rotativo de 9/12/17, página 24, “Prohibida la venta de musgo y paste de cerro en el Distrito Central”. Qué barbaridad, dejen que la gente rural (pero no la de los votos) “se haga de unos centavitos” una vez al año, es temporal, no es actividad continua. En qué afecta esto. Los involucrados pagan el permiso para tal acción, después quieren decomisarles el producto natural. Dejen de aplicar la ley de Jonás, que versa: “al más jodido hay que joderlo más”. Al menos la directora del Departamento de Ambiente y Desarrollo del Zamorano fue prudente al expresar “No solo se trata de penalizar, también debemos orientar, por ello hemos realizado capacitaciones a mujeres de las aldeas para que aprendan a elaborar y decorar productos navideños a base de elementos como bellotas y hojas secas”.
No olvidemos cómo terminó el cacareado proyecto de “pulpa y papel” en Olancho, ni una hoja de papel “kraft liner” se produjo. Qué más daños quemar cerros y montañas con colillas de cigarros o botellas plásticas, estas al recibir rayos del sol actúan como lupas, prendiendo zacateras de los alrededores. A propósito, no se averiguó nada del incendio al este de Tegucigalpa, hasta se recurrió a helicóptero militar, neles pasteles. Hubo rumores de un proyecto urbanístico, y neles pasteles. La actividad de musgos y pastes involucra además a las de figuritas de barro, artesanía rural.
Ojalá no salga la Unidad de Gestión Ambiental del D.C. que el barro para elaborar las figuritas, cause derrumbe de un cerro o montaña.
Juan Manuel Aguilar Flores
Colonia Kennedy
Tegucigalpa, M.D.C.