“Jorge”, como decidieron llamarle las enfermeras del Hospital Escuela Universitario (HEU), permanece desde hace 10 meses en la sala de varones de este centro asistencial, porque ningún familiar ha llegado a visitarlo.
La enfermera Nadalis Cáceres recordó que “lo trajo una ambulancia; según dijo la gente de emergencia de Intibucá, venía descalzo, con los pies sucios, venía por un síndrome convulsivo…”.
“Hasta el momento no se sabe cómo se llama. Cuando le dieron de alta, llegó la ambulancia, pero nuevamente lo trajeron, ya que nadie lo recogió”, agregó.
Según Cáceres, Jorge ha convertido el hospital en su nuevo hogar, porque desde que salió de su casa, no pudo volver, ya que nadie de su familia vino por él para llevarlo de regreso.
La enfermera comentó que con el paso del tiempo Jorge ha cambiado físicamente; ahora luce más robusto que cuando ingresó al HEU.
Aunque no recibe la visita de ningún pariente, algunas personas han mostrado solidaridad con el joven, ya que llegan a dejarle ropa y zapatos.
Con la esperanza de que sus familiares lleguen algún día, Jorge conserva un celular que le regalaron familiares de otros pacientes, con el que simula hacer algunas llamadas a su madre.
UN DESCONOCIDO
La encargada del servicio social del HEU, Sonia Ramos, explicó que han expuesto el caso de Jorge al Ministerio Público (MP), porque desconocen cuál es su nombre y ya no es un paciente apto para continuar interno.
Ramos dijo que para lograr identificarlo enviaron muestras de huellas dactilares al Registro Nacional de la Personas (RNP), pero no aparece en la base de datos.
“Es el caso que más tiempo nos ha llevado y la verdad con Trabajo Social se han hecho todas las gestiones, han venido varios grupos de médicos y han dicho que no es apto para estar en ese lugar, no requiere hospitalización”, indicó Ramos.
Por otra parte, dijo que han expuesto el caso a la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf), para que pueda tomar la tutela del joven, pero no han tenido respuesta. (MEF)