Multitudinaria despedida al legendario Jorge Montenegro

El ataúd con los restos mortales del escritor y fundador de la serie “Cuentos y Leyendas de Honduras”, Jorge Montenegro, fue depositado el viernes en un nicho del cementerio Jardines de Paz Suyapa, donde familiares, amistades y personas del pueblo en general, dijeron adiós a uno de los mayores difusores del folclore nacional.
El polifacético comunicador social, autor de “Misterios y algo más”, murió a los 78 años, el jueves pasado, al filo de las 2:00 de la tarde, en su casa de la colonia Cerro Grande, en Comayagüela, donde residía con su pareja, de hace 27 años, Julia Suyapa Martínez, con quien procreó tres hijos.
Montenegro falleció después de una dura batalla contra el cáncer linfático que padecía desde octubre del 2016, cuando le fue diagnosticado, poco tiempo después de haber sido operado por sufrir alteraciones en las arterias.
En el sepelio, cubierto por diferentes medios de comunicación, la mayoría de sus hijos y demás familiares, junto a muchos seguidores de las numerosas obras artísticas de Jorge Montenegro, despidieron los restos mortales del extraordinario propulsor de la cultura, la tradición oral y el arte hondureño. (KSA)

Una multitud de personas acompañó a familiares y amigos de Jorge Montenegro en sus exequias en el cementerio Jardines de Paz Suyapa.

LUTO
Reunió a varios hijos para aconsejarles antes de partir
En la ceremonia luctuosa, Suyapa Martínez, hoy viuda de Montenegro, declaró que “mi esposo era una persona de escasos recursos y no se quería morir, Jorge pasó situaciones muy difíciles en el Seguro Social, me dijo: amor no te dejo nada, pero te dejo un legado, en el futuro saldremos a los medios con todas las personas para que podamos mantener ese nombre”.
El querido y afamado humorista, Jorge Montenegro, padre de 13 hijos, previo a su fallecimiento, en la zona 8 de colonia Cerro Grande de Tegucigalpa, murió en presencia de cuatro de sus vástagos: Wendy, José, Walter y Marco Montenegro, a quienes reunió para darles varios consejos antes de partir a lo ignoto.
UNA PETICIÓN: Se declare el 9 de septiembre el Día Nacional del Folclore
El poeta, cantante, humorista, locutor y periodista, Jorge Montenegro, soñó antes de su fallecimiento, se declare el 9 de septiembre el Día Nacional del Folclore Nacional, para promover el rescate de las tradiciones y costumbres de la cultura hondureña.
Alan Montenegro, uno de los hijos de Jorge Montenegro, expresó que “mi papá me dijo que, por favor, convirtiéramos el 9 de septiembre en el Día Nacional del Folclore Nacional, porque él amaba tanto a Honduras que quería que Cuentos y Leyendas de Honduras no muriera, sino que rescatara para lo que nació”.
Montenegro explicó que muchos pueblos y aldeas recónditas del país se dieron a conocer e, incluso, se añadieron al mapa nacional, por “Cuentos y Leyendas de Honduras”, que nació un 9 de septiembre y en honor a ello, hacer de la fecha el Día Nacional del Folclore, sería continuar con la misión del programa, que es rescatar y promover las tradiciones.
VICENTE VALLADADRES: “Jorge deja un legado que debe continuar”
Un compañero de Jorge Montenegro en los programas radiales, durante 18 años, como en “El Reportero Fisgón”, Vicente Valladares, le recordó como “George Monteblack”, un hombre humilde que no olvidó sus raíces con buen sentido del humor.
También humorista, Valladares destacó que “Jorge deja un legado que debe continuar para mantener un nombre en el país y estar en el corazón de los hondureños no es fácil, conocí sus vivencias y momentos difíciles y Jorge ahí estaba como un hombre humilde que no perdió sus raíces y no perdió nunca el humor, incluso cuando partió”.
Contó que Montenegro, en su deceso, su pariente, Alan le leía un libro y “en ese momento, estaba Jorge ya para morir, y Alan le estaba leyendo el libro y Jorge le dijo: ¡Negro cállate, déjame morir hombre!, él era así”.
EDUARDO MALDONADO: “Fui fiel oyente… lo llevamos en el corazón”
El empresario y fundador del canal de televisión “Hable como Habla” (HCH), el periodista Eduardo Maldonado, donde Jorge Montenegro, tuvo espacio en la televisión hondureña, recordó al escritor como un ejemplo en el que los comunicadores y artistas deben verse.
Maldonado dijo que “yo fui oyente de Cuentos y Leyendas de Honduras, allá en la aldea de Lamaní, Comayagua y en la aldea, Cacaguapa, donde hice mis otros estudios, después lo recordaré como un espejo donde todo artista, comunicador debe verse (…) los hondureños lo llevamos en el corazón, quiero recordarlo con nosotros en el estudio donde compartió entre seis y siete meses”.