Estado indemnizará con $11 millones concesionaria del “CorredorTurístico”

El Estado hondureño pagará una indemnización de once millones de dólares a la concesionaria del “Corredor Turístico”, para resarcir los daños que deja la crisis política y por tráfico bajo que reporta el tramo carretero, según la Superintendencia de Concesiones de las Alianzas Público-Privadas.
El proyecto fue concesionado el 2012 al Consorcio Autopistas del Atlántico: CI Grodco de Colombia, CI Grodco de Panamá y Profesionales de la Construcción (Prodecon) de Honduras, por 30 años, por medio de la Comisión de las Alianzas Público-Privadas (Coalianza).
El mes anterior, la Secretaría de Finanzas (Sefin) anunció la revisión del contrato, porque al segundo semestre del 2017 se registraron “alrededor de 11 millones de dólares” en pérdidas acumuladas, confirmó el entonces, ministro de Finanzas, Wilfredo Cerrato.
En tal sentido, el superintendente de Concesiones, David Ignacio Williams, expresó ayer, que “el Estado de Honduras tiene que asumirlo, porque tiene una garantía de pago”, que está en los pliegos del contrato.
“Si la Concesionaria no puede hacer los cobros de peaje respectivo que se establecieron en contrato, entonces, quien asume la responsabilidad es el gobierno por las protestas sociales que ha habido en ese sector”.
La fuente argumentó a la vez, que el pago “se desembolsa, no solo por desembolsarlo, sino, que es parte de la mitigación y la construcción de las obras que tienen que terminarse”, en el trayecto.
La inversión total del proyecto es por 171 millones de dólares y consiste en la construcción y mantenimiento de 122 kilómetros de carretera desde la comunidad de La Barca, Cortés, pasando por El Progreso, Yoro, hacia Tela y La Ceiba, en el departamento de Atlántida.
La rentabilidad de la concesión se basa en la instalación de casetas de peaje con lo que los inversionistas esperan obtener utilidades y los capitales que prestaron bancos nacionales y de Estados Unidos.
El “Cuarto Aseguramiento” de la Iniciativa CoST-Honduras alertó a finales del 2017,  la inviabilidad de la obra, al encontrar que ni con casetas cada kilómetro se recuperaría la inversión proyectada en la concesión ya que el flujo vehicular es poco en la zona atlántica. (JB)