La visita de Haley

Por: Antonio Flores Arriaza
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En este mes hemos tenido dos, totalmente inusuales, visitas de altísimos funcionarios del gobierno Trump, presidente de USA. Primeramente, nos visitó John Creamer, subsecretario adjunto para el hemisferio occidental, cuando vino a indicarnos el interés de USA para la lucha contra la delincuencia y que presentó al nuevo agregado de negocios, Brian Nichols. Es el guía de las operaciones diplomáticas establecidos por EEUU en los países del hemisferio occidental y asesora al Secretario de Estado y al Subsecretario de Asuntos Políticos. Es decir, una importante figura con funciones hemisféricas. Anteriormente esta oficina ha fijado su posición en desacuerdo con las acciones del secretario general de la OEA, Luis Almagro tildándolo de injerencista en los asuntos de Venezuela.
Entre bastidores, ha quedado la figura del actual agregado de negocios de USA en Honduras. Si no puedes ver la cabeza, miras las huellas que deja. El cargo pareciera que le resta importancia, porque Brian Nichols viene de ser embajador de USA en Perú. Veamos qué tiene en su valija el señor Nichols. Entre 2004 al 2007 fungió como director de la Oficina del Caribe en el Buró de Asuntos del Hemisferio Occidental de donde pasó a ser ministro consejero en la Embajada de USA en Colombia hasta 2010.  Este país es el principal peón de USA en el continente y desde allí se mueven muchas piezas en el ajedrez continental. Los militares colombianos ahora se movilizan por el mundo, cumpliendo misiones para la OTAN. Justo un año después recibió la distinción Presidencial al Servicio Meritorio, debió haber hecho un gran trabajo en Colombia para lograr esa distinción. ¿Qué tipo de trabajo haría para ser tan valorado? Y ya podríamos hacer inferencias de los campos en que pudo haber desarrollado experiencia. Seguro que tal experiencia, justo en ese país, le catapultó al cargo de subsecretario principal adjunto en el Buró Antinarcóticos del Departamento de Estado donde laboró hasta 2013. Este salto a esa posición nos informa de lo que estuvo haciendo en Colombia. De aquí fue llevado a la Oficina de Asuntos Políticos en México y El Salvador. Seguro que allí no estuvo a cargo del ceremonial diplomático. En 2014 fue nombrado embajador en Perú hasta 2017 donde trabajó en la Alianza del Pacífico, tema que ahora se está manejando en Honduras luego de su TLC con Corea del Sur. El país en medio de Bolivia y Colombia/Venezuela. De allá, de ser embajador, lo han traído a Honduras. ¿Acaso se habrá portado mal? Es un reiterado funcionario distinguido, no ha recibido solamente la distinción presidencial indicada arriba, también ha recibido seis premios de honor superior y varios reconocimientos del Departamento de Estado. Tremenda joyita nos han traído. Seguro que, desde un cargo con un nombre de bajo perfil, jugará un importantísimo papel para aplicar la estrategia que el gobierno de Trump ya ha diseñado para que Honduras juegue en el partido que se disputará muy pronto contra las maras. Recordemos: ya estuvo en El Salvador, México y Colombia. Es decir: conoce todo el circuito. Y, por su posición geoestratégica, Honduras es el “portaaviones” por excelencia tanto para USA como lo ha sido para los narcos. Y el socialismo del siglo XXI ha hecho y sigue haciendo, esfuerzos para sumarlo de su lado.
Este personaje, de aspecto simpático e inocente, nos fue entregado, nada menos que por el Secretario de USA para asuntos hemisféricos que, seguramente, lo presentó ante nuestras autoridades civiles y militares para que se entienda quién es realmente y sus delicadas funciones sean debidamente respaldadas para que cumpla su misión a cabalidad.
Y ahora, nos visita la embajadora de USA ante la ONU señora Nikki Haley. Ella, desde el inicio de la gestión en la ONU se mostró como una “dama de hierro” al mejor estilo de Trump: golpea y vuelve a golpear. Sin ninguna duda alguien de entera confianza del presidente Trump. La embajadora Haley ha sabido representar muy bien las ideas de Trump ante todos los estados del mundo en la ONU. Algo nada despreciable y de mucha complejidad ya que su relación es grupal y simultánea y no solo afrontar estado por estado.
Obviamente, USA quiere que Honduras asuma un papel en la lucha local y regional contra las maras. Trump está muy preocupado por el crecimiento y organización de las maras en USA. Ya hay ciudades con barrios dominados por las maras con asesinatos como los que miramos aquí cuando alguien no acata la voluntad de la mara. Jóvenes asesinados por ingresar a territorios secuestrados por las maras. Esto no puede ser tolerado al interior del imperio. Y mucho menos si los protagonistas son latinos. Trump, y sin duda el general Kelly (exhombre fuerte en Centroamérica y príncipe del gobierno de Trump) gran conocedor de la región, ya han diseñado una estrategia para actuar y llevar las acciones a estas tierras y no pelear la guerra en su territorio, algo que USA siempre ha evitado: que el pueblo americano no sufra los horrores de la guerra. Ahora, vendrá una intensa persecución y captura de los mareros en territorio de USA y su expulsión hacia sus países de origen, para buscar su eliminación aquí y no allá, ya que los daños colaterales serían muy dañinos para las aspiraciones reeleccionistas de Trump. La expresión “una Honduras fuerte es un USA fuerte” nos transmite lo que empezará a suceder. Y, ojalá, solo sea para combatir las maras y no como en tiempos de Reagan. Pero, las maras y muchas otras falencias nuestras, se combatirían mejor con más trabajo, educación, vivienda digna y salud. Más que otra cosa, ojalá que esa amistad que ahora nos han dicho sí existe con Honduras, sea para que vengan inversionistas y fuentes de empleo productivo y no empleo armado.
Pero, ¿por qué la embajadora de USA ante Naciones Unidas? Recordemos que nuestra embajadora Elizabeth Flores ha sido posicionada como candidata a la Presidencia del Consejo Permanente. Lizzy Flores tiene mucha experiencia por su continuidad en el cargo y su participación en diversos eventos internacionales. Honduras fue uno de los siete países que apoyaron a USA en su intento de lograr que la ONU aceptara que Jerusalén sea la capital de Israel. La actual Presidencia caducará el próximo marzo. Haley ha declarado que Honduras no solo es amiga de USA sino familia. Qué mejor que “la familia” esté al frente del Consejo de Seguridad. Un pacto como este podría llevar incluida la permanencia de los hondureños que han estado cobijados por el TPS y la no inclusión en el Consejo de la OEA del tema “elecciones en Honduras” ¿qué pasaría al engavetarse?