Ciberbulling, una práctica de adultos y adolescentes

Por: José Antonio Pereira Ortega
Coronel ® [email protected]
Para nadie es desconocido el muy comentado y cobarde acto de enmascararse, usando las diversas herramientas tecnológicas digitales (computadoras, teléfonos inteligentes, tabletas etc.) vía redes sociales para acosar de manera psicológica y persistente a las personas, con mensajes cargados de irrespeto, insultos, falsedades, acusaciones infundadas y hasta el peligroso acto de montaje de datos falsos o sustitución de identidades, que usen sus sitios para expresar mensajes hirientes, en contra de personas naturales y jurídicas.
Comento en especial, el principal daño colateral materializado cuando ilegalmente intervienen sus aparatos y penetran sus correos, WhatsApp y otras formas de comunicación tecnológica moderna disponible hoy día, debiendo recalcar que esta conducta además de deshonesta es ilegal de parte de las personas que la practican, incluso las autoridades están sujetas a hacerlo pero con una orden judicial.
Para demostración de lo que estoy comentando, entre muchos casos, nos es suficiente referir el bochornoso caso del Palenque de los notables funcionarios de la OEA que nos han mantenido entretenidos y se apoderaron del Twitter para mutuamente denigrarse y poner en evidencia “su vasta madurez diplomática” para resolver conflictos. Con esto y para variar, Honduras ocupó las primeras planas noticiosas por convertirse en el palenque escogido por “los notables componedores” para su diatriba mediática.
No pretendo caer en el error de publicitar semejante desaguisado y apoyar la propagación mediática, que a falta de noticias relevantes cualquier churro lo magnifican y a los hondureños nos convierte en testigos de su neurastenia volatilizada. Pero bien no es esto lo que quiero compartir, aunque está relacionado, me refiero al ciberbulling (acoso virtual) de y entre personas y es más vil porque se ha extendido contra los adolescentes y niños para propósitos infames como el acoso sexual (El Grooming) a través de las redes sociales.
Un detalle importante es que esta práctica se ha generalizado y la realizan tanto adultos como adolescente e incluso niños de edades entre 7 y 14 años, creyendo que es una simple travesura, sin darse cuenta que pueden causar daños morales y psicológicos en otros niños y muchos lo hacen porque cuando observan que sus padres lo hacen, entienden que tienen licencia para hacerlo y como dice el dicho popular “el mono ve, el mono hace”.
En estas circunstancias quiero contribuir con alguna información producida por expertos como el Manual de Seguridad para la Prevención de Delitos del señor David Lee y recordar algunas de las osadías que pueden cometerse:
1. Subir al internet imágenes de la víctima reales manipulado (montaje) o con información falsa (fake new), atribuidas a esa persona o niño.
2. Promover línea concursos o pantomimas para escoger en el trabajo, escuela o en el barrio a la persona más gorda, más flaca, al menos inteligente, al menos simpático etc.
3. Crear perfiles falsos en redes, para en primera persona mandar escritos y situaciones inventadas confesando algo o describiendo acontecimientos privados reales.
4. Hacerse pasar por otra persona y difundir con ese nombre mensajes ofensivos, insultos, etc., con la finalidad que él o los ofendidos reclamen o se venguen de la persona real que supuestamente mando los mensajes.
5. Uso de rumores y situaciones falsas, o adulterar hechos reales para burlarse, denigrar o calumniar a alguien usando de mal manera y cobardemente las redes.
6. Generar y difundir videos pornográficos, o narración de situaciones con contenidos eróticos o explícitamente sexuales de otras personas sin su consentimiento.
7. No aceptar regalos y desestime propuestas sospechosas invitando a citas ciegas con desconocidos.
8. Proferir y enviar amenazas o mensajes amenazantes con frecuencia en correos, WhatsApp, Twitter, Instagram etc., u otro medio electrónico con la intención de asustar o agobiar a otra persona o personas.
9. Dar de alta a datos personales de una persona en diferentes sitios con la finalidad de hacerla víctima de correos no deseados.
10. Crear datos personales para mediante mensajes poder establecer contacto e iniciar relaciones no deseadas con desconocidos.
Como podemos apreciar hay peligros en el ambiente por la invasión y el acoso que se propaga por las redes (ciberbulling), y hay que tomar previsiones como algunas de las siguientes:
1. Asegure sus equipos con claves de acceso difíciles y no se descuide de él, aunque duela no se los preste a los niños para jugar.
2. Tenga cuidado con el manejo de sus datos personales, listados telefónicos y direcciones, evite postear fotografías familiares, estados de cuenta, fotos de vacaciones o viajes.
3. Mucho cuidado con la adicción a publicar todo lo que hace, debe ser conservador y tener cuidados con quienes comparte su información, en especial en grupos, no publique actividades e información confidencial.
4. Corte a toda persona que empiece a mandar mensajes insultantes, provocadores o de contenido inapropiado.
5. Guarde los mensajes y sitios de donde le mandan información inadecuada y denunciarlo a las autoridades y al proveedor de servicios.
6. No acepte intercambiar información cuando le hagan insinuaciones sexuales o pornografía.
7. Evite seguir el juego de los acosadores cuando usted los reta ellos se estimulan y es peligroso.