Humor sin fronteras

José María Leiva Leiva.
Películas de nacionalidades distintas que nos han hecho pasar gratos momentos de comicidad y sano entretenimiento lo hemos experimentado al disfrutar las cintas mexicanas “Amor a primera visa”, “Me gusta pero me asusta” y “Cómo cortar a tu patán”; más las españolas “Toc toc” y “Señor, dame paciencia”, y la cinta italiana “La hora del cambio”, del dúo cómico Salvatore Ficarra y Valentino Picone.
Cinta esta última, donde los habitantes de Pietrammare (se trata de la localidad de Termini Imerese, Palermo), un pueblo imaginario de Sicilia, están cansados de la situación del lugar. Aunque ya se han acostumbrado al caos que deriva de saltarse las normas de convivencia urbana y vecinal, ya no pueden más, pues viven a sus anchas según se los permite su corrupto edil municipal.
En este sentido, la gente no paga sus impuestos, construyen y se aparcan donde les da su real y regalada gana, las carreteras se encuentran en mal estado, las aceras están llenas de excrementos de perro y basura en general, en su puerto no hay barcos y la contaminación procedente de la fábrica es insufrible. Por todo eso ven que ha llegado la hora de cambiar y aprovechan las elecciones para lograrlo. El candidato electo resulta ser Pierpaolo Natoli (Vincenzo Amato), quien ha prometido en su campaña política, orden y legalidad en el lugar.
Pero ello, ha sido solo un espejismo e intenciones tibias de los electores, ya que toda la ciudad e incluso el país entero están llenos de deshonestidad. Por ende, su política acaba siendo vista como una amenaza por los vecinos, que presionan para echarlo, haciendo finalmente que renuncie. El filme nos deja una ejemplar moraleja: A los que viven en el desorden, en la anarquía y la inmoralidad no les gusta que se les impongan reglas que dictaminen lo contrario.
Por su parte, “Amor a primera visa”, de Pedro Pablo Ibarra (“El cielo en tu mirada”), es una comedia romántica que se centra en la historia de Rachel (Laura Ramsey), una diplomática de la embajada de los Estados Unidos quien, tras una noche de juerga, es rescatada de la calle por Alejandro Fernández (Jaime Camil), un mariachi a quien, días atrás, le negó la visa. Alejandro le oculta la laptop que carga Rachel, haciéndole creer que estaba perdida, pero que él le iba a ayudar a encontrar. Una treta que le servirá para ablandar a la funcionaria estadounidense y conseguir así el permiso de entrada a los Estados Unidos para él y su hija María, desencadenando una historia de amor entre ambos personajes.
Me gusta pero me asusta” dirigida por Beto Gómez (“Volando bajo”), es una comedia de enredos que narra la historia de Brayan Rodríguez (Alejandro Speitzer) un joven de Sinaloa, de apariencia más bien torpe y retrasado que se ve forzado a vivir en la Ciudad de México cuando su padre  (Joaquín Cosio) desea extender su negocio en esta capital. Aquí conocerá a Claudia (Minnie West), otra tipa introvertida y antisocial que al trabajar en una agencia de bienes raíces, terminará alquilando una residencia y un local comercial a quien ella sospecha se trata de un narcotraficante.
Cómo cortar a tu patán”, dirigida por Gabriela Tagliavini (“Ladies’ Night”) nos presenta a Amanda (Mariana Treviño) una terapeuta especialista en ayudar a las mujeres que tienen conflictos en sus relaciones afectivas para deshacerse de sus molestas parejas. Uno de esos casos ocurre con su hermana Natalia (Camila Sodi) que tiene por novio a un hombre mujeriego, egoísta, narcisista… Un patán, como lo titula el nombre de la cinta, por lo que Amanda tomará como misión personal separarlos.
Pasemos repaso ahora a las dos películas españolas. “Toc toc” dirigida por Vicente Villanueva (“Nacida para ganar”, “Lo contrario al amor”), es una adaptación de la famosa obra de teatro del dramaturgo francés Laurent Baffie. Relata la historia de un variopinto grupo de pacientes con algo en común: todos sufren un Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC): Síndrome de Tourette, Síndrome de Diógenes y obsesión por el cálculo matemático, trastorno compulsivo de verificación, obsesiones con las líneas, con las bacterias…
Todos ellos han sido citados a la misma hora, 4:30 de la tarde, pero su médico que está de viaje, no puede llegar a tiempo, ya que su vuelo ha sufrido un inesperado retraso. Esa circunstancia hará posible que las dos horas de espera en el elegante despacho se conviertan en una auténtica terapia de grupo, dándonos todos ellos regias interpretaciones corales. Destacándose en el cast, figuras conocidas como Rossy de Palma (“Julieta”, “Señor, dame paciencia”), Alexandra Jiménez (“100 metros”) y Oscar Martínez (“El ciudadano ilustre”, “Paulina”), que terminará siendo el camuflado facultativo.
Finalmente, “Señor, dame paciencia” dirigida por Álvaro Díaz Lorenzo (“La despedida”, “Café solo o con ellas”), que narra la historia de Gregorio (Jordi Sánchez) un banquero muy conservador, muy del Real Madrid y muy gruñón. Cuando su mujer fallece repentinamente (Rossy de Palma), deberá cumplir su última voluntad: esparcir sus cenizas en el río Guadalquivir. Para llevar a cabo su tarea, Gregorio deberá pasar un fin de semana en Sanlúcar de Barrameda con sus hijos, dos chicas y un chico…y sus respectivas parejas, a los que Gregorio no puede ni ver:
Un catalán muy culé; un hippy anti-sistema, y Eneko, un vasco de origen senegalés, pareja de su hijo homosexual. Ese fin de semana, Gregorio pondrá a prueba su tolerancia y su capacidad de perdonar, y esta familia disfuncional tendrá que aprender a aceptarse, con sus virtudes y sus defectos.