AL TANTO

EL amable público regresa arrancado, pero relajado. De vuelta de los viajes. De hacer turismo interno. De las largas vacaciones de Semana Santa. ¿Con ganas de trabajar? Quién sabe. ¿De reponer todo el tiempo perdido por el prolongado asueto? Menos. Aparte de las playas, de los centros de entretenimiento, de los pintorescos paisajes para recrear los ojos y avivar el espíritu, el resto de las actividades económicas permanecieron semiparalizadas casi la semana entera. Sin embargo, pudo constatarse –tanto por la poca afición que se quedó en la metrópoli, como entre quienes optaron por irse a los pueblos– redimibles demostraciones de fe conmemorativas a la temporada religiosa. Así que hay todavía compatriotas respetuosos de las consagraciones como muchos que dedican su tiempo, no solo a colmar su insaciable frenesí de entretenimiento, sino al recogimiento espiritual.

Ahora bien. Para ponerlos al tanto de lo sucedido como de las tareas que quedaron pendientes. Los interlocutores del diálogo –no es seguro si solo los tres invitados originalmente o si ahora con la participación de los excluidos– esperan la convocatoria de Igor para revisar el avance. Pese a que hubo oportunidad para la reconciliación y el perdón durante la semana mayor, ninguno sintió el influjo divino como para aproximarse al adversario por cuenta propia. Así que siguen a la espera de una señal del chileno para acudir a las oficinas del PNUD y proseguir con los temas de la agenda. Hay que aclarar que hasta el momento los encuentros solo han sido de los representantes de los partidos, sin que haya asistido ninguna de las cabezas. El candidato del dúo aprovechó una entrevista a su regreso para aclarar que no se sienta en un diálogo si este no reúne dos condiciones: “Que sea vinculante y que tenga un mediador internacional”. Ah, y el tema toral a tratar es que “tiene que haber otras elecciones, ya sea una segunda vuelta o convenir adelantar los comicios del 2021 a más tardar el año siguiente”. En el plano internacional. En México arrancó la campaña. AMLO acariciando lo que tantas veces se le ha escurrido por los dedos de la mano, con un 30% (algunos lo tienen más arriba) seguido del candidato del PAN con un 21% y el del PRI con 16.4%. En Costa Rica el fin de semana dilucidaron la disyuntiva en segunda vuelta. Entre el conservador evangelista que subió como la espuma cuando se opuso al criterio de la Corte Interamericana de Derechos Humanos ordenando abrir las puertas al “matrimonio entre el mismo sexo” y el oficialista de centro izquierda. Lo sucedido como el alto volumen de indecisos y el alto abstencionismo se toma como evidencia del desencanto ciudadano hacia el sistema político.

En Europa el secesionista “expresident de la Generalitat” capturado en Alemania mientras cruzaba la frontera en carro desde Dinamarca para refugiarse en Bélgica, desde la cárcel le avisa a su afición: “No claudicaré, no renunciaré, no me retiraré”. Sin embargo difícilmente los españoles permitirán el desmembramiento de su territorio, causa a la que se han sumado las principales fuerzas políticas con excepción de “Podemos”. Pese a que la autocracia celebró la caída de PPK en el Perú, el sustituto no ha cambiado la posición de su país y en las últimas horas ha difundido la lista de los invitados a la Cumbre de las Américas en Lima, donde no figura el nombre del mandamás venezolano. En Brasil se están quedando sin políticos de figuración para las próximas elecciones. Una sentencia de la justicia tiene a Lula a un paso de la cárcel –como de la inhabilitación política– mientras el actual mandatario que baraja sus posibilidades de reelección considera que la última embestida de un juez contra “su círculo de confianza” busca “destruir su reputación y retirarle de la vida política”. Hubo más, pero ya no da el espacio, así que hasta aquí la actualización.