Joven graba el momento en el que fue drogada durante un concierto (Video)

Una joven que asistió a un concierto grabó sin querer el momento preciso en el que un delincuente puso droga en su bebida en Francia.

Gracias a la grabación la Policía francesa ha detenido al hombre que le echo la droga conocida como burundanga a su víctima, para robarle cuando estaba bajo los efectos del estupefaciente.

Según diario El Mundo, los hechos se cometieron hace aproximadamente un mes en el sur de Francia, durante un concierto, según fuentes cercanas al caso.

En el vídeo, que justamente estaban grabando la víctima (con el pelo rubio) y una amiga suya (morena) cuando ocurrió todo, se observa cómo se acerca un hombre que en cuestión de décimas de segundo echa algo en la copa de la primera.

El hombre después se marcha y, aunque el vídeo ya no continúa, se supone que espera cerca de su víctima a que esta sienta los efectos de la droga que anula la voluntad para robarle, cuyo nombre real es escopolamina.

Esta droga es la más utilizada por violadores y ladrones de discoteca, que aprovechan descuidos de sus víctimas para echarla en las copas, y a partir de ahí surgen situaciones de lo más peligroso, que van desde violaciones en grupo hasta rutas al cajero automático con su verdugo para sacar dinero de la cuenta. En casi todos los casos, las víctimas acaban cayendo en un profundo sueño y no recuerdan apenas nada al despertar.

Sin embargo, en esta ocasión la joven puso una denuncia y entregó el vídeo, donde por suerte se podía identificar al autor del delito. Según las mismas fuentes, en cuanto se le identificó fue detenido.

Hace precisamente un mes, la Unidad Adscrita a los Juzgados de Madrid de la Policía Nacional detuvo en el distrito Centro al conocido como Rey de la Burundanga, un marroquí que había robado a multitud de chicas al echarles esta droga en sus copas. Se le arrestó por los delitos de robo con fuerza, robo con violencia, estafa y hurto, y tenía una docena de antecedentes.

En aquella ocasión, como el detenido intentaba ligar con sus víctimas antes de echarles la droga, estas mantenían recuerdos de él y pudieron facilitar una descripción con la que se le identificó. El hombre solía ir a casa de las chicas y desvalijarlas cuando habían perdido el control.