Además de saber que uno de sus miembros había muerto de forma violenta, la tristeza y angustia se desbordaron para una familia de campesinos al no poder reclamar el cadáver, ya que no cuentan con recursos económicos para comprar el ataúd y mucho menos para trasladarlo hacia su lugar de origen en la aldea Las Vegas, municipio de Trojes, El Paraíso.
El calvario para los agricultores comenzó el lunes anterior, cuando el joven jornalero José Isaías Sánchez López (27) fue encontrado sin vida al fondo de una quebrada. Supuestamente el joven fue ultimado a golpes y los homicidas posteriormente tiraron el cuerpo al afluente.
Tras el crimen, al sector se desplazaron agentes policiales y personal forense del Ministerio Público (MP), para realizar el respectivo levantamiento cadavérico. Luego, el cadáver fue trasladado a la morgue capitalina para realizar la autopsia respectiva.
Tres parientes de Sánchez López -madre, hermano y hermana- al darse cuenta que su pariente había muerto de forma violenta, como pudieron consiguieron unas “fichitas” y se desplazaron a Tegucigalpa, con la intención de retirar el cuerpo del labrador.
Lamentablemente, los dolientes no sabían que para reclamar el cuerpo debían tener listo un ataúd y transporte para trasladar los restos mortales hasta su pueblo de origen.
Por tal razón, los empleados de la morgue capitalina ayer no podían entregar el cadáver. La tarde de ayer, los humildes aldeanos seguían a la espera que una empresa televisora capitalina les regalase el ataúd. Sin embargo, tenían otro problema, al no tener dinero para pagar un “flete” para llevarse a su ser querido ya muerto.