Del timbo al tambo…

Por José Luis Moncada Rodríguez

Hace mucho no escuchaba esa frase… en reunión política a nivel nacional se me acercó un dirigente o activista liberal de unos cincuenta y tantos años, se presentó y me dijo, estoy preocupado y decepcionado… y eso?, le dije… el liberalismo anda del timbo al tambo…

Le invité a sentarse y departir un café, y como con sotana lo confesé… A ver dígame de dónde esa conclusión de cuatro palabras… Pues mire, desde el 2009 no levantamos cabeza… es más, a veces como avestruz la metemos, no quiero opinar sobre lo de la salida de “Mel” y demás… eso ya aburre, pero dígame algo… qué han hecho los líderes del partido y las autoridades del CCEPL en los últimos años? Yo solo veo pleitos y confrontaciones y ahora en esas redes sociales donde se insultan y provocan, por qué no se lo dicen entre ellos, así como usted y yo, con un café… por cierto falta el pan.

En mi pueblo todavía creemos que el Partido Liberal es el que nos mejoró y dio beneficios, construyó carreteras, agua potable, escuelas, el alumbrado llegó hace poco, y allí vamos con un colegio, alcalde siempre colorado, pero ya con diferencia poca, por un poquito y perdemos por una bolsa solidaria que regalan, a mí no me dan… y no la aceptaría. Oiga, -me dice- y Mauricio Villeda qué pasó? Nada que organizó o mejoró al partido… dicen que es de una organización de la Iglesia y que tiene reglas difíciles; a todo esto yo, solo como buen confesor, escuchaba; sabe, las internas del partido son buenas, a mí me gustan, siento que nos ponen a pensar y seleccionar al mejor, a veces nos equivocamos, las pasadas fueron peleadas… yo voté… pero no le digo por quien… el voto es secreto, ja ja ja, …los liberales siempre en lo que yo recuerdo salen unidos y por eso ganamos varias veces, -y se puso a recordar los presidentes liberales- esta vez no, y por eso perdimos… por qué, y usted que está cerca… Luis Zelaya sacó a la licenciada Gabriela? Esa señora es inteligente; para el huracán Mitch nos ayudó con un puente que nos tenía incomunicados, y es guapa, un poco llenita, pero está bien, ja ja ja… pero ya en serio… no entiendo, ella sumaba votos y vea, los perdió en las generales… somos terceros… es triste, mi padre, en paz descanse, se hubiera emborrachado, y siguió en esa línea de opiniones, -y me dijo- ahora usted y yo, aquí mojo este pan con mi café.

Usted tiene una opinión bastante básica, pero clara -le dije- me gusta eso, es el pensar de muchos liberales, yo no puedo responder ni opinar sobre dirigentes y autoridades anteriores, es evidente que no hicieron mayor cosa para mejores resultados, sí le puedo decir lo que yo haría, …a ver dígame, me dice con un bocado de pan… pues primero, si fuera el presidente del partido y tuviera ambiciones a ser candidato, renunciaría, ya que si vamos a unas internas se puede manipular u usar el partido a su favor y eso no es de liberales; organizaría el CCEPL con equipo de profesionales a tiempo completo que implemente una estrategia de fortalecimiento institucional de nuestros conceptos departamentales y municipales, dotándolos de equipo y programas que sirvan para levantar censo, programas de capacitación política, fortalecimiento de redes de jóvenes, mujeres, obreros y campesinos; identificar liderazgos y participación ciudadana organizada; haría oposición independiente y propositiva y además un planteamiento serio de reforma al proceso electoral, al censo y otras relacionadas a fortalecer la democracia.

Y Luis qué hace? No conozco la agenda o temas de prioridad del presidente del CCEPL. Cómo me dice… y usted no está allí? Pues sí, pero tiene mayoría y ellos deciden, si es bueno o malo, juzgue usted… oiga, -me dice- renuncie, para qué va estar allí? Soy liberal de 39 años de militancia y no me quito fácil…

Entonces… -me pregunta- usted anda del timbo al tambo? No, -le dije-, yo estoy claro… son otros los que no tienen un interés genuino y liberal… oiga, le digo, no comente esto… me pueden expulsar del partido… se tapó la boca con su mano.