Gustavo Guifarro, presidente del Colegio De Veterinarios

El presidente del Colegio Médico Veterinario, Gustavo Guifarro, hace serias advertencias sobre la credibilidad del estatus sanitario del país por la falta de control. Expone, asimismo, el aporte de este gremio, aunque muy subestimado, en la actividad económica del país. ¿Cree que comemos carne de perro, gato y caballo? Aquí nos da la respuesta.

¿Dónde se inició como veterinario?

En la Dirección General de Ganadería, lo que ahora SENASA. Nos entrenaban por tres meses, en leyes y laboratorios antes de mandarnos al campo. Era un requisito para todos. Comencé en 1984 y estuve en diferentes momentos, hasta que renuncié en el 2016.

¿Por qué renunció?

Como tenía una regencia a la vez, mucha gente pensaba que había un conflicto de intereses entre el cargo y la parte privada y opté por renunciar para dedicarme lo privado.

¿Y le va bien en lo privado?

Eso de bien dejémoslo entre comillas. La situación está dura, nos iría bien si los sueldos para los veterinarios fueran de acuerdo a las capacidades.

¿Cuánto gana un médico veterinario?

Depende de los puestos, pero hay colegas que siguen ganando 15 mil lempiras desde hace 25 años y no se van por no perder sus prestaciones.

¿Se subestiman al veterinario en Honduras?

En Honduras, el término de médico veterinario se refiere a “mataperros” y “matavacas”, así despectivamente. O “cura perros” o “curavacas”, a pesar que el campo es muy amplio.

¿Pagan bien los servicios privados?

La gente no está acostumbrada a pagar. El ganadero lo busca a uno, lo invita a un café y un fresco y ahí llegó la consulta.

¿Ni los grandes ganaderos?

La ideología del ganadero es aprender del vecino o se creen veterinarios. Los ayudantes de los veterinarios terminan poniendo una clínica, lo que crea un problema de malas praxis.

Como colegio ¿En qué están enfocados?

Estamos luchando por mejorar la salud de la gente porque es lo más importante, vigilar las enfermedades de los animales transmisibles a las personas. El concepto es que debemos cuidar la salud de la gente y de los animales.

Hay gente que no cree que los animales transmiten enfermedades ¿Qué les dice?

Claro que sí, como la rabia, la leptospirosis, tuberculosis, brucelosis y otras enfermedades parasitarias. Y los humanos se las pasan a los animales también.

Otra gente hasta duerme con sus mascotas ¿Es recomendable?

Si están en control veterinario se pueden tener mascotas en las casas.

Los perritos y gatitos ¿qué tan peligrosos pueden ser?

En perritos hay enfermedades que se transmiten como la larva migrans cutánea, que es un parásito que se va por la piel. El gato transmite toxoplasmosis que causa abortos o problemas para embarazarse en las mujeres.

¿Aconseja tener mascotas?

Con el debido cuidado, sí. Las mascotas son saludables y hasta son terapias para sus dueños. Pero a la gente no le gusta pagar por el control médico y creen que es una receta de cocina para todo.

¿Qué piensa del cobro por los pericos?

Fue un mal rollo, mal planteado, que hasta nosotros caímos con el certificado médico veterinario. Está bueno registrar la población animal, pero se les fue la mano en el cobro.

Se habla mucho que estamos comiendo carne de perros, ratones, gatos y caballos ¿Cree en eso?

Así como asegurarlo es bien difícil, pero en las ventas callejeras es evidente la carne de perro, gatos y caballos.

¿Es mala consumirla?

Ninguna es mala consumirla si hay establecimientos para comerla. Además, se debe sacrificar al animal en el sitio adecuado, con una inspección, antes, durante y después del sacrificio y que el médico certifique que está apto para el consumo humano.

¿A usted le habrán dado “gato por liebre” en esas ventas callejeras?

Yo creo que sí, más cuando uno se anda echando sus tragos también se echa su pedacito de carne de perro o de caballo, pero como ya con el guaro y limón no se siente, más bien uno dice que está rica.

¿Alguna anécdota?

Una vez en Nicaragua, comí carne de culebra creyendo que era carne de pollo. Nos estábamos echando unos tragos.

¿Cómo está el país en sanidad animal?

Es bastante difícil la situación en los últimos años, creo que hubo una mejoría entre el 2006 y el 2014 cuando se estuvo tratando de mejorar los servicios veterinarios.

¿Y actualmente?

SENASA (Servicio Nacional de Sanidad Animal) no tiene una estructura definida para enfrentar los problemas sanitarios que tenemos.

¿Politizada?

No tiene la cantidad suficiente de profesionales para este fin. En el 2010, la Organización Mundial de la Salud Animal recomendó abrir 33 oficinas a nivel nacional con un médico veterinario y dos asistentes para dar la cobertura. Ahorita solo tiene 12 y no tienen los profesionales completos.

Y los que están ¿tienen los perfiles?

Ese es el problema, que entra personal y no se entrena como antes. Además, no hay programas para la vigilancia de todas estas enfermedades de las que le hablé. Nosotros certificamos 120 fincas libres, gracias a un programa ejecutado por donaciones de USDA, pero no se le dio seguimiento.

¿Cómo hacen vigilancia ahora?

Con brigadas, sin médicos veterinarios, sin cumplir las normativas, ahí es donde cojeamos.

Yo escuché que no hay veterinarios capacitados para estas tareas ¿Es cierto?

Falso. Somos 288 en el país, inscritos en el Colegio, hay más, pero no están colegiados. De esos, 48 trabajan con SENASA y los demás en privado. En el 2007 luchamos para abrir la escuela de medicina veterinaria, pero quedó en estudios y en el 2009 luchamos para que se abriera la carrera de veterinaria en Catacamas para que salgan profesionales capaces.

¿Hay garantía en las carnes que consumimos?

Las que salen de las plantas de procesamiento autorizadas por SENASA están garantizadas. El problema son aquellas carnes no vigiladas por falta de personal y no sabemos si era una vaca que murió por mal parto o por una enfermedad.

Pareciera que ha crecido la demanda de los servicios veterinarios pero hay pocas clínicas ¿Por qué?

La verdad es que es muy caro abrir una clínica, por el pago de impuestos, permisos ambientales y los impuestos de guerra. En Tegucigalpa y San Pedro Sula ha crecido la demanda y muchos colegas han invertido mucho dinero para sus clínicas en cambio hay otros que están “pichueliando”, como dicen.

¿Usted tiene clínica?

Estoy pensando abrirla, pero cuando miro que hay que invertir tanto, lo sigo pensando.

¿Los rastros están vigilados?

Deberían estar vigilados, pero como le decía, hay pocos veterinarios y más bien quieren contratar a extranjeros y pagarles en dólares. Es el colmo.

¿Habrá gente en Honduras que se alimente de insectos?

Sé de otras culturas que los comen, pero aquí en el país no.

¿Se erradicó el mentado gusano barrenador?

Con modestia aparte debo decirle que trabajamos fuerte para erradicarlo con un programa manejado por los gringos, durante seis años. No se han vuelto a ver casos.

¿Qué otras enfermedades se erradicaron?

En el 2001, se erradicaron la enfermedad de New Castle, Influencia aviar, laringotraqueitis y salmonelosis aviar, aunque hay cosas que no están claras ahí. Entre el 2006 y el 2012 se erradicó la peste porcina clásica. Pero lo mejor fue que todo este trabajo lo hicieron veterinarios hondureños.

¿Existe el chupacabras?

Esas son leyendas y la verdad yo no sé. Lo que si he escuchado es del comelenguas. Cuando estuve en el sur me tocó ir atender varios casos pero es diferente al chupacabras.

¿Cómo es el comelengua?

El comelengua lo que hace es comerle la lengua completa al animal, no lucha y muere como que lo van a destazar. En la finca de mi suegro se presentaron varios casos. El hermano de él dijo que destazó algunos animales, pero no les encontró sangre.

¿Será cierto que existen?

No hay evidencia científica. Unos dicen que es un ave grande con gran cola con dos cabezas, que los duerme, o sea, hay mucho de qué hablar. El chupacabra más creo que se refiere a una fiera en la zona porque hace cinco seis años, hubo casos en Comayagua, pero lo que se halló fueron huellas de algún puma.

¿Cómo estamos en repoblación bovina?

Estamos reventados.

Pero en la SAG dicen que andamos bien…

Es más cuento que otro cosa, porque no se ha hecho el enfoque como se debió hacer. Hace muchos años hubo un programa, se trajeron las vacas de Estados Unidos y se repartieron por compadrazgos políticos.

Se habla de dos millones y medio de animales…

Yo no creo. La única forma que me quiten la duda es haciendo un censo.

¿Es cierto que Nicaragua compró todo el ganado?

Nicaragua vino hace tres años a comprarnos todas las vaquillas, ellos hicieron un buen trabajo, se las dieron a los productores, iban a medias y les pusieron un toro.

¿Y aquí?

Aquí ni eso podemos hacer, inventaron la vaca feliz, pero tampoco funcionó. Hace muchos años se manejó el toro comunal, pero tampoco funcionó. La inseminación artificial en 1987, que cobraba diez lempiras por inseminación con derecho a tres saltos, por decirlo así, también fue un fracaso.

¿Por qué tanto fracaso?

Porque los mismos productores no pagan, no son empresarios, quieren que los veterinarios les den una pastilla para quitarle el hambre al animal.

¿Qué deben hacer los ganaderos?

Capacitarse, desarrollar las terneras, llevarlas al peso adecuado para preñarlas y pagar un veterinario en vez de preguntarle al vecino porque los dos van a cometer el mismo error.

¿Cuántos partos al año?

Lo ideal es un parto por año. No cada cuatro años, como ocurre en la generalidad de los ganaderos. Si pudiéramos tener un ternero por año y una producción promedio de ocho de litros, otra cosa fuera.

¿Tampoco hay leche?

Tampoco. Existe un gran negocio en la importación de leche en polvo, en vez de generar más hatos ganaderos, que es una fuente de trabajo. Además, a los pequeños productores le están pagando muy poco, a nueve lempiras lo más y a cinco en tiempos de invierno, no saca ni los costos.

¿La transferencia de embriones será una alternativa?

No hay transferencia de embriones, lo que hay es un gran contrabando desde Estados Unidos.

¿Cómo así?

Hay gente que los traen en la bolsa, no pasan por ningún registro, no se sabe lo que traen, el vuelo es de tres horas y la vida del embrión es de seis.

¿Quién se beneficia?

No sé. Lo raro es que en vez de permitir traer embriones de zonas libres, como Brasil, se permite el contrabando a pesar que ya existe el protocolo para que se legalice, No sé a quién se protege.

¿Cuánto vale un embrión?

Depende. Los estafadores los andan ofreciendo a 100 dólares, sin garantía, pero aquí como les gustan los extranjeros que les hablan bonito sí les creen, pero si ya va un indito no le hace caso.

A pesar de todo ¿sería una alternativa?

La transferencia de embriones es muy buena pero en ciertos niveles de ganaderos porque aquí no podemos, ni manejar ni la monta natural o la inseminación artificial, menos la transferencia de embriones.

¿En qué se debe enfocar el gobierno y los empresarios del agro?

En fomentar programas para que la gente entienda que a una vaca hay que darle el 10 por ciento de comida de su peso natural. Si la vaca pesa 900 libras debe darle 90 libras de zacate, pero hay dueños que le da dos pailas.

¿Cree que hay interés del gobierno en estos temas?

Hay intentos de programas, pero se quedan en papel mojado. La Organización Mundial de la Salud Animal ha querido reunirse con el Presidente de la República para exponerle la situación y no ha podido.

¿Cuál es el riesgo para Honduras?

Estamos a la buena de Dios. Ojalá no nos vaya a afectar en el estatus sanitario del país, ya tenemos la limitación del camarón a México y así van a venir otras prohibiciones. El país está entrando en una falta de credibilidad del estatus sanitario y nos extraña que otros gremios estén callados, aunque les afecte la bolsa como los productores y exportadores.