JUTICALPA, Olancho. Saúl Sarmiento García (52), hijo del extinto diputado nacionalista, Julio Eduardo Sarmiento (“Don Lalo”), fue abatido a tiros la tarde-noche de este domingo, en esta ciudad, por desconocidos que lo sorprendieron cuando se dirigía a su vivienda.
Saúl Sarmiento regresaba a su casa, ubicada en la colonia los “Los Profesores”, en el vehículo de un amigo, quien de acuerdo a las versiones preliminares, era un empleado el Poder Judicial, que le dio aventón hasta su residencia.
El cuerpo de Sarmiento quedó a una cuadra de su residencia, ya que en procura de evitar la ráfaga de disparos y salvar su vida, corrió para intentar escapar de sus asesinos.
Al menos dos muchachos jóvenes le daban persecución y ya lo tenían identificado, qué movimientos diarios tenía, y aprovecharon para materializar su plan.
El cuerpo de Sarmiento quedó de espaldas y tenía varias perforaciones de arma calibre desconocido, mientras el carro en que lo conducían tenía varios impactos de bala, pero su acompañante salió ileso.
Un par de semanas atrás, la víctima había comparecido a un programa televisivo, en Juticalpa, para denunciar que la Agencia Técnica de Investigación Criminal lo había citado para pedirle información sobre la muerte de uno de sus hermanos, que también lo mataron en enero de este año.

En su comparecencia manifestó tener algún temor por su vida, producto de algunas enemistades que arrastra la familia desde la muerte de su padre.
Al tiempo de confirmar que no usaba ningún tipo de arma de fuego para su defensa, porque consideraba que no tenía cuentas pendientes con nadie y que todo en torno a su vida, lo dejaba en manos de Dios.
En noviembre del año pasado, Saúl Sarmiento salió de la granja penal, donde estuvo recluido por más de 4 años, por problemas personales que lo privaron de su libertad.
Fue precandidato a diputado en la corriente de Fernando Anduray, en el primer período que aspiró el actual mandatario de la República.
Las tragedias en la familia Sarmiento parece les persiguen, ya que el 13 de enero anterior, a menos de un mes, Leonel Sarmiento, hermano de Saúl, fue muerto a plomo en el interior de su negocio en el centro de Juticalpa.
Y casi un mes después las autoridades policiales no tienen elementos de juicio de los orígenes del crimen, pese a las líneas investigativas en las que trabaja la policía en Olancho.
Los jóvenes que acribillaron a Sarmiento salieron con rumbo desconocido en un carro, del cual tiene las características la Policía, las que podría dar a conocer hoy, para dar con el paradero de los facinerosos.

