May pide al parlamento británico apoyar su nueva estrategia sobre el Brexit

Londres, Reino Unido.- La primera ministra británica, Theresa May, pedirá el miércoles el aval de los diputados a su nueva estrategia sobre el Brexit que podría desembocar en un aplazamiento de la fecha de divorcio, prevista el 29 de marzo, si estos rechazan de nuevo su acuerdo de salida de la Unión Europea (UE).

Theresa May someterá primero al voto del parlamento, el 12 de marzo como muy tarde, la versión modificada del acuerdo de divorcio que habrá obtenido de Bruselas, cuyo primer borrador fue rechazado masivamente por los diputados en enero.

Si esta nueva versión resulta igualmente aplazada, May les pedirá el 13 de marzo si quieren salir de la UE sin acuerdo. Si lo rechazan, les presentará el 14 de marzo una propuesta de aplazamiento «limitado» del Brexit, idea a la que en cambio siempre se opuso.

La dirigente conservadora tuvo que decidirse por esta opción ante las amenazas de dimisiones dentro de su propio gabinete, frente a la posibilidad de una salida sin acuerdo.

En el tabloide The Daily Mail, Theresa May exhortó el miércoles a los diputados a «hacer sus deberes para que el país pueda avanzar» y a apoyar el acuerdo que les presentará el próximo mes, expresando su optimismo sobre el resultado de las discusiones con la UE.

– Segundo referéndum –

Entre las enmiendas sometidas al parlamento el miércoles figura la de los diputados conservador Oliver Letwin y laborista Yvette Cooper, que pretende anclar la propuesta de May de aplazamiento reclamando «la medidas legales necesarias para cambiar la fecha de salida» de la UE.

Jeremy Corbyn, líder del Partido Laborista, principal partido de la oposición, anunció la presentación de una enmienda que pide mantener al país dentro de una unión aduanera con la UE tras el Brexit. Si esta enmienda no es adoptada, Corbyn presentará -en una fecha posterior que no fue precisada- otra que reclama un segundo referéndum sobre el Brexit, después del de junio de 2016 en el que el sí al Brexit obtuvo un 52% de sufragios.

Jeremy Corbyn se había abstenido hasta ahora proponer un referéndum sobre el mismo tema, consciente de que la idea divide también en el seno de su partido, donde en las circunscripciones de varios diputados se votó por una salida de la UE.

Pero otros laboristas abandonaron el partido debido a sus dudas sobre el Brexit, y formaron un grupo independiente de 11 diputados, incluidos conservadores, que presentó por su parte una enmienda que reclama un segundo referéndum. Esta enmienda recibió el apoyo del partido independentista escocés SNP y del pequeño partido eurófilo liberal-demócrata.

La moción del gobierno y las enmiendas que sean seleccionadas por el presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, serán sometidas a votación a partir de las 19H00 GMT.

El nuevo plan de Theresa May obtuvo el apoyo de los miembros del Partido Conservador, asustados por la hipótesis de una salida sin acuerdo, especialmente temida por el sector económico.

-«Escasez» –

En un anuncio publicado el martes, el gobierno recordó que, sin acuerdo, el crecimiento de la economía británica sería de 6,3% a 9% inferior a su nivel de desarrollo durante quince años en caso de mantenimiento en la UE.

Igualmente advirtió de las consecuencias de posibles perturbaciones del tráfico en el Canal de la Mancha, especialmente el riesgo de «escasez» de algunos productos alimentarios como las frutas y las verduras frescas.

«Satisfecho de que la primera ministra haya efectivamente descartado un Brexit sin acuerdo, dando así a los diputados la posibilidad de contar con más tiempo para encontrar un compromiso, si su acuerdo no se aprueba», tuiteó Richard Harrington, el secretario de Estado encargado de Industria, que había amenazado con dimitir.

El ministro encargado del Brexit, Stephen Barclay, señaló en cambio en la BBC que «el ‘no acuerdo’ sigue sobre la mesa. El parlamento deberá decidir».

La posibilidad de una prórroga provocó sin embargo el enfado de los conservadores eurófobos, partidarios de una clara ruptura con la UE. El diputado Jacob Rees-Mogg vio en esto un «complot» para detener el Brexit. «Si no hay mayoría para el acuerdo de la primera ministra […], estaremos en la misma situación» tras un aplazamiento, señaló el miércoles en la BBC. AFP