Un total de 86 migrantes, entre ellos varios hondureños, fueron detenidos en hoteles de Tapachula, México por agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) y Policía Federal (PF).
El grupo fue trasladado a una sección de la Feria Mesoamericana, el cual es habilitado como albergue. En ese lugar los migrantes son registrados antes de su repatriación.
Las autoridades mexicanas también detuvieron a dos parejas y a sus hijos hondureños, acusados de incitar a los migrantes a rebelarse contra las autoridades.
Los detenidos son: Suyapa Lorena Hernández, Dunia Aguilar Hernández, David Estigua Gómez Hernández y Wilfrido Sosa Mejía, así como dos niñas y cuatro niños, todos hondureños.
La detención de las dos familias se realizó a petición de los propios migrantes, quienes acusaron a esas personas de azuzarlos.
El operativo fue atestiguado por Dagoberto Navarro Acuña, visitador adjunto de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), y Sergio Martínez Olivo, de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, quienes corroboraron que los migrantes no fueron golpeados y tampoco se violentaron sus derechos humanos al momento de ser subidos los vehículos del INM, según información de los medios mexicanos.