El sueño de «Canelo» Álvarez

Aunque es un obsesivo de los relojes caros, si pudiera, el peso mediano mexicano Saúl ‘Canelo’ Álvarez cambiaría los suyos por una brújula, siempre y cuando, en vez del norte, la aguja del instrumento le marque el camino para hacer real un sueño: ser a la vez campeón mundial de las cuatro organizaciones del boxeo profesional.
Este el objetivo que el púgil de 28 años empezará a construir el próximo 4 de mayo cuando se enfrente en Las Vegas al estadounidense Daniel Jacobs en un pleito en el que se disputarán los cinturones del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y la Asociación Mundial (AMB), en poder de Álvarez, y el de la Federación Internacional (FIB), que ostenta el neoyorquino.
«Sé que tendré un rival difícil enfrente, pero estoy listo para ganar y regresar como campeón», dijo ante los medios mexicanos el ‘Canelo’ con 51 victorias, 35 por nocaut, dos empates y una derrota en casi 14 años en los cuadriláteros del pugilismo rentado.
Con el surgimiento de la FIB, en 1983, y la Organización Mundial de Boxeo (OMB), en 1988, el deporte de los puños entró en una crisis de credibilidad y fue común ver a cuatro monarcas mundiales en cada división, un equivalente a decir que ninguno era el campeón mundial o por lo menos era imposible saber quién era el mejor del mundo.
Unificar los cinturones apareció como alternativa para decidir el mejor, pero en una disciplina con tantos intereses comerciales es difícil llegar a acuerdos para que un peleador reciba la oportunidad de optar por las cuatro fajas. Pocos lo han conseguido.
Álvarez, nacido en Guadalajara, occidente mexicano, firmó el año pasado un contrato por 365 millones de dólares por 11 peleas con la empresa Dazn. El trato con el servicio streaming, es el más lucrativo en la historia del deporte, y si bien aumenta el mito alrededor del Canelo, no le calma su desespero por ser el monarca absoluto de los medianos.
Si vence el 4 de mayo a Jacobs, con 35 triunfos y dos derrotas, le arrebatará el cinturón de la FIB y entonces al mexicano solo le quedaría conquistar el título de la OMB, en poder desde octubre pasado del estadounidense Demetrius Andrade.
La pelea ante Jacob será para el mexicano la antesala del gran combate de su vida contra Andrade o quien le arrebate el cetro que pudiera ser el kasako Gennady Golovkin. De momento, Saúl no piensa en eso porque irá por pasos y ahora solo le interesa derrotar al estadunidense.

Un hacedor de milagros llamado Daniel Jacobs

Cuestionado sobre todo al inicio de su carrera porque sus rivales no eran de alto nivel, el ‘Canelo’ mejoró su credibilidad después de vencer en 2014 al cubano Erislandi Lara, en 2015 al puertorriqueño Miguel Cotto y el año pasado a Golovkin, con quien empató en 2017.
Son peleadores de gran clase, pero significan un reto diferente al de superar a Jacobs, un rival con velocidad de manos y piernas, buena técnica y con una capacidad de lucha que heredó de la victoria más importante de su vida, contra el cáncer.
En mayo de 2011, Jacobs padeció un osteosarcoma, forma agresiva de cáncer de huesos, pero hizo lo que todo condenado a muerte, luchar contra la muerte, y tras cumplir un tratamiento médico en Nueva York, no solo logró el milagro de recuperar la salud, sino que regresó al boxeo con el apodo de ‘Miracle man’.
«Va a ser una pelea exigente para el ‘Canelo’. Se trata de un peleador distinto a Golovkin, frontal, fuerte, de cuidado porque con un golpe puede noquear. Jacob no es solo fortaleza, hay inteligencia y velocidad. Es un púgil con una dosis de peligro diferente a Golovkin», explicó a Efe Salvador Rodríguez, uno de los especialistas de boxeo profesional más respetados de Latinoamérica, analista de la cadena ESPN.
Eddy Reinoso, entrenador del ‘Canelo’ sabe que el 4 de mayo su pupilo deberá mostrar la mejor forma deportiva de su carrera y, además de trabajar en la defensa, ha incorporado a sus rutinas de entrenamiento, ejercicios de fortalecimiento de piernas con ayuda de su propio cuerpo.
En los vídeos que su equipo coloca en las redes sociales, puede verse al campeón mexicano en el momento de realizar repeticiones de sentadillas a 90 grados y completas, desplantes, secuencias de ejercicios de piernas laterales y de frente y medio burpee con doble sentadillas.
«Nuestro objetivo este año es ganar todos los cinturones y que Saúl se convierta en el primer mexicano con los cuatro campeonatos mundiales de su peso», dijo Reinoso, quien comparte las obsesiones de su alumno más aventajado.

El galán de las mujeres hermosas

Según las revistas del corazón, Saúl Álvarez es un casanova de gusto refinado con un sofisticado historial como novio de mujeres hermosas de nacionalidades diferentes, entre ellas la modelo venezolana Shannon de Lima, exesposa de Marc Anthony, la colombiana Bárbara Turbay, Miss Mundo Colombia 2012, y la modelo mexicana Marisol González, por mencionar tres famosas.
Además el peleador colecciona autos caros, tiene su avión privado, cabalga en caballos de raza y viste como ‘lord’ inglés, lo cual le da un aire de sofisticación en un mundo de hombres duros. Sin embargo, Álvarez es una especie de prestidigitador en el manejo del tiempo, sabe cuándo ocuparse de los placeres mundanos y en qué momento limitarlos para concentrarse en la preparación de sus peleas.
En su hermosa crónica “El perdedor”, el novelista estadounidense Gay Talese escribe lo qué siente un boxeador al ser noqueado, según confesiones del campeón mundial de peso pesado del siglo pasado Floyd Patterson: “Es una buena sensación, en realidad. No duele, es tan solo un mareo muy agudo. No ves ángeles ni estrellitas: estás en una nube agradable”, reveló el púgil.
La única derrota del ‘Canelo’, ante Floyd Mayweather en 2013, fue por decisión, así que el mexicano no sabe si lo dicho por Patterson es verdad. Álvarez confía en jamás comprobarlo y a falta de una brújula en su muñeca en estos días traza el camino con duras sesiones de entrenamientos y la confianza en que un día, quizás pronto, a base de trabajo el maldito sueño se pueda volver real. (Gustavo Borges/ EFE REPORTAJES)