Una profesional de la enfermería fue ultimada a balazos la noche del miércoles cuando salía de trabajar en el Hospital San Francisco de la ciudad de Juticalpa, Olancho.
Se trata de Ana María Ferguson, quien según testigos fue interceptada en las cercanías de la Iglesia Cristiana Reformada, por dos sicarios a bordo de una motocicleta.
Informes preliminares de la Policía Nacional indican que los criminales sin mediar palabra atacaron a la enfermera, quien murió de forma inmediata.
Conocidos de la mujer, detallaron que hace varios meses desconocidos habían atentado contra la víctima, que escapó ilesa del ataque.
Agentes de investigación realizan las pesquisas pertinentes para establecer las razones por las que le quitaron la vida y la identidad de los criminales.
Pobladores de la ciudad reaccionaron consternados y aseguraron que con el crimen de la enfermera ya son varias las muertes violentas en la localidad.
El cuerpo sin vida de Ferguson, fue trasladado la madrugada de este jueves a la Morgue de Tegucigalpa, donde se espera que sus familiares lo reclamen en las próximas horas.
